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EL IMPERIO
El
imperio sólo ve adictos, cómplices o enemigos, no personas.
El imperio sólo concibe mercancías.
El imperio se coloca a sí mismo en la puerta del Infierno.
El imperio de que hablo no es el de César ni el de Montezuma,
sino el de la mediocridad.
El imperio no tiene más remedio que desaparecer, o desaparece
todo, y él con todo.
Lo primero que el imperio ha sacrificado es a sus poetas.
El imperio promete su desaparición como un paraíso.
No se puede creer en ninguna promesa del imperio.
El paraíso sólo puede consistir en la libertad de la obediencia.
El imperio prostituye la libertad y prostituye la obediencia.
El imperio no existe nada más que para proclamar que existe.
El imperio sólo existe como existe el vacío.
El imperio adora el vacío que deja a su paso.
El imperio está en cada instante del aire que se respira.
Una islita dice: no.
Cintio
Vitier
9 de enero
2004
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Yankees: please, go home
Gabriel Mazzarovich
Cuando EEUU posa sus ojos sobre una región del mundo la historia enseña
que hay que tener cuidado porque enseguida vienen los marines. Cuando
esa región del mundo es América Latina, peor aún.
En estos días todos los peso pesado de la diplomacia del gobierno de
George Bush se dedicaron a atacar a Cuba, a Venezuela, a rezongar a
Argentina y a Brasil y a manifestar preocupación por la situación en
Bolivia.
El primero fue el subsecretario de Asuntos Hemisféricos, Roger Noriega,
miembro de la ultraderecha republicana y vinculado a lo peor de la mafia
terrorista cubana de Miami. Ese triste personaje, rezongó al presidente
argentino Néstor Kirchner por sus buenas relaciones con Cuba y por
haberse reunido con el diputado y líder campesino boliviano Evo Morales.
Kirchner le respondió como Noriega no esta acostumbrado que le respondan:
con dignidad.
Luego fue el turno del Secretario de Estado, Colin Powell, quien se
supone es una "paloma" en un nido de halcones, según sesudos analistas
internacionales. Su curriculum contempla la jefatura del Pentágono, un
rol protagónico en las dos guerras del Golfo, en la de Afganistán y en
las intervenciones militares en Yugoslavia y Somalia. Bastante bélico
para ser paloma, ¿no?.
La supuesta "paloma", Colin Powell, apoyó en todos los términos a
Noriega y elevó un escalón más el nivel de la "preocupación" de EEUU.
Finalmente salió al ruedo la Asesora Especial de Seguridad de Bush,
Condolezza Rice, quien ratificó la posición de Noriega, advirtió al
gobierno de Venezuela que van a estar "mirando atentamente" si realiza
el referéndum que quiere la oposición; acusó a Fidel Castro de estar
financiando la desestabilización de la democracia en Venezuela, en
Bolivia y también en Uruguay y se mostró "muy preocupada" por la
evolución de "los acontecimientos en Bolivia".
La acusación a los presidentes y por lo tanto a los estados de Cuba y
Venezuela de "financiar la desestabilización de la democracia" es un
hecho grave. Mucho más grave es aún viniendo de quien viene y previendo
las consecuencias que puede acarrear.
Lo que realmente ocurre es que Bush y los sectores económicos que
representa: la industria petrolera, el complejo bélico-militar y los
sectores financieros, están teniendo dificultades.
Estamos en pleno proceso electoral en EEUU y parece que nadie le puede
asegurar a Bush que logre resultar electo por fraude dos veces, hasta en
el país del norte eso es demasiado.
La aventura petrolera de Irak no viene como se esperaba y ni siquiera la
captura del antiguo agente propio, Sadam Husseim, rindió los frutos
esperados.
La disputa por el mercado mundial con Europa y el bloque asiático, donde
para colmo de males, cada vez pesa más China y menos Japón, está
compleja.
EEUU quiere a América Latina como espacio propio y jugando a su favor en
la lucha por el reparto del mundo, para eso el ALCA y su contraparte
militar.
EEUU pasó, en su estrategia de dominación para América Latina, de la
fase de represión y dictaduras fascistas de los 60 y 70, a la fase de
las democracias recortadas y la doctrina neoliberal como religión en
los 80 y 90. Hoy asistimos al derrumbe de esta modalidad y por lo tanto
al nacimiento de otra.
Lo que realmente preocupa y molesta a EEUU, a sus industriales y a sus
banqueros, es la consolidación en el sur del continente de un bloque
político encabezado por Brasil y Argentina, al que se suma Venezuela y
ahora también los países andinos, que impulsa una política independiente
y soberana.
EEUU no quiere bloques políticos autónomos en su "patio trasero".
Lo que realmente "miran atentamente" es el derrumbe de las políticas
neoliberales y de los líderes que las encarnaban.
Lo que les inquieta es que Brasil y Argentina busquen una integración
latinoamericana, relancen el diálogo Sur-Sur, establezcan coordinación
con India y Sud Africa y se acerquen a China.
Lo que les molesta profundamente es que Cuba y Venezuela muestren un
intercambio económico sobre nuevas bases y una colaboración creciente y
que Brasil hable de un banco latinoamericano de inversión.
Lo que la mafia cubano americana, que con la complicidad del gobierno de
EEUU ha transformado Miami en el refugio internacional de terroristas,
estafadores y ladrones a gran escala, no puede soportar; es que Brasil y
Argentina hablen de un acuerdo 4 +1 del Mercosur con Cuba. De esta
manera se le abrirían caminos económicos y diplomáticos a Cuba que
resquebrajarían seriamente el aislamiento a la que la someten.
Pero saben que cualquier acción directa contra Argentina o Brasil es hoy
imposible, por eso golpean en los flancos y entonces inventan tres
demonios: uno ya tradicional, Fidel Castro, otro más nuevo Hugo Chávez y
el tercero de nuevo tono, Evo Morales y los campesinos bolivianos.
¿Quién desestabiliza la democracia?
EEUU con gobiernos republicanos y también con gobiernos demócratas ha
sido históricamente quien ha desestabilizado las democracias
latinoamericanas.
EEUU ha protagonizado a lo largo de la historia 215 invasiones o
agresiones directas a otros países. En América Latina en una rápida
enumeración se puede citar los casos de: México, Nicaragua, Cuba,
República Dominicana, Guatemala, Granada, Haití y Panamá. A ello hay que
sumarle el apoyo a los golpes de Estado y las dictaduras en varios de
esos países, aún sin que sus marines se vieran directamente, esta vez
usaron a la CIA. Esa modalidad la repitieron en: Argentina, Brasil,
Bolivia, Chile, El Salvador, Paraguay y Uruguay.
Para recordar que no es una política histórica hoy en desuso, hay que
decir que EEUU estuvo involucrado directamente en el golpe de Estado
contra Chávez en Venezuela en 2002; que asesores de EEUU dirigieron la
represión contra los mineros y campesinos bolivianos que arrojó más de
60 muertos el año pasado y que también asesores de EEUU actúan desde
hace años en Colombia, con el Ejército y los paramilitares.
EEUU no ha reparado en formalidades de ninguna clase y utilizó todos los
métodos; enseñó y financió la represión a gran escala que dio como
resultado más de 100 mil desaparecidos en el continente y cientos de
miles de muertos y torturados. Usó el asesinato político directo contra
Augusto Cesar Sandino, Emiliano Zapata; tuvo participación en las
muertes de Salvador Allende, Omar Torrijos, Ernesto "Che" Guevara y en
la serie interminable intentos de asesinato contra Fidel Castro.
Esa es la conducta histórica y actual de EEUU.
Bush en el marco de su "guerra contra el terrorismo" dio permiso a la
CIA para asesinatos políticos. Además, en el marco de esa estrategia
global, EEUU impulsa en América Latina el "Plan Colombia" y busca darle
nueva dimensión a su presencia militar en el continente; ya tiene la
base militar de Manta en Ecuador y quiere una en la zona de la
denominada "Triple Frontera" entre Argentina, Brasil y Paraguay.
No se trata de paranoia entonces. Hay que preguntar: ¿Qué significan
concretamente las amenazas de fascistas como Condolezza Rice y Roger
Noriega? ¿Qué hacían asesores de EEUU dirigiendo la represión en
Bolivia? ¿Qué pretende el embajador de EEUU participando de los actos de
los golpistas en la plaza de Altamira en Caracas? ¿Qué pretende el
representante de EEUU en La Habana fundando "partidos de oposición"? ¿Qué
buscan el futuro jefe de la CIA y la legisladora más vinculada a la
mafia cubana de Miami en gira por Uruguay?
Hay nuevos vientos en América Latina y hoy los referentes son Lula,
Kirchner, Chávez y por supuesto, Fidel Castro. Los hombres de EEUU:
Carlos Menem, Alberto Fujimori, Fernando Collor de Melo, Jorge Batlle,
Sanchez de Losada, caen en el desprestigio y en el descrédito popular.
La defensa de la democracia, de la independencia y la soberanía del
continente es una tarea de "seguridad nacional" para las naciones
latinoamericanas.
Y por eso, Noriega, Rice y Powell tienen que saber que los gobiernos
dignos y los pueblos de Latinoamérica también estamos "mirando
atentamente" lo que ocurre en Bolivia, Cuba y Venezuela y que aprendimos
hace rato a decir "Go home".
* Periodista uruguayo
Enviado por
Revista Koeyu Latinoamericano
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Tel. (58212) 481 7740
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