LA
LOCO
di
Wilfredo Gil Figueredo y Juan
Pérez Díaz
PRÓLOGO
Prolífera ha sido Cuba en emisoras de radio. Basta decir que pasaban de
treinta las que transmitían en Ciudad de La Habana al triunfo de la
Revolución. Muchas de ellas cambiaban de nombre, una y otra vez, según
los intereses comerciales de sus dueños. La COCO mantuvo siempre estas
siglas.
Es
una de nuestras más antiguas emisoras, su existencia data de los años
treinta del siglo veinte y con ese mismo nombre se le escucha en
nuestros días. Esta antigüedad guarda directa relación con sus orígenes,
con sus raíces imbricadas a la historia de nuestro país, a sus legítimos
anhelos populares. Un mambí fue su fundador, Luis Casas Romero, autor de
la patriótica pieza El Mambí y todas sus composiciones de finísimas
letras y melodías son expresión de la identidad del alma cubana y
perdurables aportes a la cultura.
Otra de las razones del arraigo de la COCO en la preferencia de los
oyentes fue su defensa de los genuinos intereses de nuestra población
más humilde, que solo había conocido de tiranías o de gobiernos venales
y corruptos, desde la instauración de aquella república de máscara y
mentira con el apéndice lastrador de la Enmienda Platt.
En
el título La COCO, baluarte de la palabra, los periodistas Wilfredo Gil
Figueredo y Juan Pérez Díaz entregan a sus lectores una monografía
histórica, valioso testimonio de este capítulo de la radio cubana, que
desde su nacimiento —en agosto de 1922, también con Luis Casas Romero,
fundador con su familia de la 2LC— aportó notables páginas y
distinguidos nombres a este medio de difusión, que, no obstante los
grandes adelantos de la televisión, no desaparecerá nunca por su
utilidad y los recursos despertadores de la imaginación de que se vale.
La
raigambre popular y cubana de la COCO fue rescatada a partir del 28 de
enero de 1948, cuando el periodista martiano Guido García Inclán la
adquirió para hacer de ella un verdadero portavoz de la causa de un
pueblo luchador por sus derechos.
Desde entonces los micrófonos de la emisora estuvieron a la disposición
de Eduardo Chibás, Juan Manuel Márquez, Manuel Bisbé, Fidel Castro y
otros líderes del partido Ortodoxo.
Recientemente había sido clausurada la emisora 1010 por el gobierno
Auténtico, y por la COCO hablaron Lázaro Peña, Juan Marinello y Salvador
García Agüero, dirigentes del Partido Socialista Popular.
En
este recuento histórico sobre la COCO Guido emerge con su personalidad
fuerte, su rectitud, su honradez y su permanente generosidad de quien
siempre echó sinceramente su suerte con los pobres.
Nos parece escuchar su inconfundible voz cuando en este libro leemos la
transcripción de una entrevista, o de uno de sus vibrantes editoriales.
Con el amor que siempre nos lo hará inolvidable, con justa veneración,
Wilfredo Gil y Juan Pérez nos presentan a un Guido vivo, paradigma de
periodistas que hizo de su profesión un modo permanente de combatir por
su pueblo hasta sus últimos alientos.
Cuando en nuestros días escuchamos la COCO vuelan nuestros sentimientos
al recuerdo de Guido García Inclán.
Él
y su fundador, el mambí Luis Casas Romero, vinculados siempre a lo
popular, hacen que esta emisora, una de las más antiguas de Cuba, con su
nombre primigenio, perdure en el tiempo y continúe hoy al servicio del
pueblo edificador de sus anhelos.
Julio
Batista Delgado
AGRADECIMIENTO
Al
publicar este texto, quisiéramos agradecer a un grupo de personas, que
sin su colaboración decidida no hubiera sido posible lograr este
trabajo. Ellos son:
Evelio Sánchez Pérez, quien nos aportó un inmenso caudal de fuentes y
datos personales, a la vez que nos estimuló sobremanera al logro de este
empeño; a María Luisa Casas Romero, quien nos aportó interesantes datos
de la etapa de su padre, Luis Casas Romero estuvo al frente de la
emisora; a María Luisa Mac-Beath, que nos dio importantes informaciones
y grabaciones de la etapa en la que ella trabajo junto a Guido en la
COCO; a Gloria y Roxana, hijas de Guido García Inclán, que nos
facilitaron el archivo familiar de su padre; a Pío Luis Machado, que nos
facilitó datos relacionados con Guido y sobre todo con editoriales y
otros documentos radiados por Juan Manuel Márquez en la COCO; a los
compañeros de la Oficina de Asuntos Históricos del Consejo de Estado,
que nos facilitaron importantes documentos sobre Guido y la COCO. A
Pedro Yera, quien nos dio interesantes datos y anécdotas sobre la etapa
en la que estuvo trabajando en la COCO; a Diego Méndez Calero, Jefe del
Departamento Deportivo de Radio Rebelde, quien nos facilito las
entrevistas con los, compañeros de esa especialidad; a Sergio Amarantes
Rodríguez, con sus valiosas informaciones sobre la creación del
movimiento de corresponsales en la COCO. A julio Batista Delgado, Héroe
Nacional del Trabajo que escribió el prólogo. En definitiva a todos los
entrevistados que aportaron sus valiosos testimonios y otros que
accedieron a facilitarnos datos y fuentes para la realización de este
trabajo.
Los
autores
INTRODUCCIÓN
Con este
trabajo, nos proponemos hacer justicia histórica a una emisora de
radio que en el decursar de los años ha legado a su audiencia un
ejemplo de trayectoria informativa estable, con un diseño ajustado a
los intereses más genuinos del pueblo cubano.
La COCO
en su larga vida, desde su formación embrionaria, que data desde
el mismo comienzo de la radio en Cuba, es decir, desde el 22 de
agosto de 1922, ha brindado a sus oyentes los servicios más
requeridos y estimados mediante un diseño de programación amena y
fluida, que siempre ha gozado de la preferencia del público.
Desde
la lejana 2 LC, su fundador, el mambí Luis Casas Romero, incluyó el
parte del tiempo y la hora, pasando por el recuento de la Lotería
Nacional y luego en los años de la década del 30 se iniciaron
programas de masiva participación y otros de melodías populares,
que contaron con un vasto repertorio, incluidos los mejores
intérpretes del patio y de otros países, así como los espacios
cómicos que alcanzaron una audiencia máxima.
También
la música campesina alcanzó espacios estelares en los que se
suscitaron enconadas y fraternales competencias entre los bandos
Tricolor y Azul, con la participación de los mejores trovadores de la
época. Estos programas se trasladaban en ocasiones a otros lugares
del país.
Tampoco
faltaron en la emisora los programas de corte lírico, ni la música de
cámara con las mejores agrupaciones de la época e intérpretes de
primera línea del ámbito nacional y extranjero.
Si a
ello sumamos los aportes de contenido social y político que ha
experimentado la emisora a lo largo de su trayectoria —como los
concursos de aficionados, diseñados para la formación de cantantes,
con un sello verdaderamente educativo y los espacios que tuvieron
que ver con debates de temas económicos , políticos y sociales de
actualidad, emitidos durante las décadas del 30 y 40—, cabe situar a
este órgano radial en un sitial de gran significación.
En el
orden netamente informativo, cabe destacar los noticieros y
boletines variados que siempre han abarcado temas nacionales e
internacionales, con destaque en el deporte, mediante las
narraciones de encuentros y noticieros de esta especialidad desde
la década de los años 30.
En el
aspecto informativo no deportivo merece mención aparte la creación del
Periódico del Aire en 1948, fundado por Guido García Inclán, espacio
al que le imprimió un nuevo estilo. A partir de esta estructura
se crearon espacios que hicieron época por la manera certera y
limpia de decir y denunciar los males de la época, en la que
sobresalieron : “La Hora de la Ortodoxia” primero, y después
“Vergüenza contra Dinero”.
También
durante esa etapa, ocupó los micrófonos de la COCO lo más puro y
valiente del movimiento revolucionario en las voces de Juan Manuel
Márquez, Manuel Bisbé, Eduardo Chibás, Salvador García Agüero, Lázaro
Peña, Juan Marinello y Fidel Castro, entonces recién graduado, quien
ya despuntaba como un futuro líder de masas en todo el país.
A partir
de 1960, luego del triunfo de la Revolución, la COCO vuelve a
retomar el diseño patriótico y revolucionario de antaño con nuevos
elementos. Entonces se incrementaron los espacios
informativo-deportivos y se crearon verdaderas escuelas de
narradores y comentaristas deportivos que han nutrido a emisoras
nacionales. Se creó y fortalece el movimiento de corresponsales,
estructurado acorde al nuevo diseño de alcance y destino de la
emisora, que asumió la función de ser una de las plantas de radio
capitalina.
ANTECEDENTES
La
actual emisora COCO-CMCK tuvo sus orígenes a principios del pasado
siglo, con el comienzo mismo de la radio en Cuba y fue su
fundador el patriota camagüeyano Luis Casas Romero.
Este
ilustre mambí había nacido en La Ciudad de los Tinajones el 24 de
mayo de 1882 y con apenas 13 años había insistido en varias
ocasiones para que lo admitieran como soldado del Ejército Libertador.
Al fin lo incorporan como segundo trompetista de las tropas al mando
del general López Recio Loinaz, que operaban en los alrededores de
Camagüey. Durante la contienda libertadora fue herido en una
pierna y terminó la misma con el grado de soldado.
Luego
de concluir la guerra, el joven Casas Romero nunca aceptó un solo
centavo de lo que le correspondía como veterano de la Guerra de
Independencia. Comenzó a trabajar como tipógrafo cajista de obra y
corrector de pruebas en el diario Las Dos Repúblicas, más
tarde, como crítico musical del propio periódico y de La Discusión.
También se dedicó a impartir clases de música y actuar en bailes y
fiestas.
Posteriormente fundó, organizó y dirigió la Banda Infantil de Camagüey,
que contaba con cuarenta y cinco alumnos menores de catorce años, con
la cual comenzó a ofrecer retretas en el parque Agramonte, y además
actuaba en las procesiones y fiestas.
En 1913
se convocó a una plaza para Director de la Banda de Artillería y Luis
Casas se presentó y la obtuvo por oposición. A la caída del régimen
machadista lo nombran Capitán Director de la Banda de Música del
Estado Mayor del Ejército.
Luis
Casas Romero fue un virtuoso de la flauta, con la que se hizo
sentir en improvisadas serenatas y conciertos. El teatro Martí lo
conoció actuando como flautista junto a Moisés Simons. También
actuó en diferentes orquestas, y como director Musical en varios
teatros. Fue primer flautista en las más importantes compañías de
ópera italiana que actuaron en Cuba y estuvo considerado entre los
más grandes flautistas de América.
El
célebre músico fue también un destacado compositor, cuya versatilidad y
extenso repertorio le hizo crear decenas de composiciones, entre
ellas la criolla El Mambí, en 1912; Si llego a Besarte,
en 1918 y otras como: A orillas del Tínima (mosaico cubano);
Adiós al bohío (canción); Alma Criolla (criolla); Así eres
tú (bolero); Chelito (danzón); De Oriente a Occidente
(popurrí); Constancia (pasodoble); Huyéndole a tu engaño
(bolero-son); así como las marchas El recluta, La estrella
solitaria, Inocentes (dedicada a los ocho estudiantes de
medicina fusilados en 1871) y La Marcha Símbolo, que utiliza
el INDER en sus actividades, además de numerosos himnos.
Mención
aparte debe hacerse de su afición por la radiotelegrafía, a la que
le dedicó la mayor parte de su tiempo libre como un ferviente y
entusiasta radioaficionado; a esta actividad incorporó a su hijo,
Luis Casas Rodríguez, quien se convertiría en un trabajador consagrado a
la radio en Cuba.
El
historiador y biógrafo de Luis Casas Romero, Oscar Luis López, al
referirse al destacado músico cubano, expresó lo siguiente: “Deseamos
destacar que el maestro Luis Casas Romero fue pionero de nuestra
radiodifusión. Radioaficionado desde la década del 1910 a 1920,
perteneció a aquellos héroes anónimos que con sus cacharros o
cachimbitos, surgiendo de abajo y sin ninguna ayuda oficial, dieron
lugar al nacimiento de la radiodifusión en nuestro país”.1
En
1920, Luis Casas Romero instaló la planta Q2LC, basada en un circuito
Calpits de 5 watts en la banda de 75 a 150 metros,
utilizando telefonía y telegrafía. Posteriormente, Luis Casas Rodríguez
(hijo), construyó una emisora basada en un circuito MIZ de 10 watt
que, previo permiso de la Secretaría de Comunicaciones, salió al aire
con las siglas 2LC. Esta inició sus transmisiones el 22 de agosto de
1922, aunque no se inauguró oficialmente hasta el 16 de abril de l923,
operando en la banda de 360 metros. La 2LC fue la simiente de la
actual emisora COCO-CMCK, y no solo de esa emisora, sino también de la
radio en Cuba. Fue el mismo propietario, Luis Casas Romero, quien años
después fundó la emisora de onda corta COC que dio paso al nuevo
código de identificación conocido como la COCO.
Además
de Luis Casas Romero, otros cubanos también incursionaron en la radio de
Cuba, como Humberto Giquel, en 1920, Oscar Astudillo y Amadeo Saenz de
Galahorra, además del español José Lara y otros, quienes se comportaban
como radioaficionados, cabe el honor al insigne mambí de comenzar una
programación regular sin apenas interrupciones, aun antes de ser
inaugurada oficialmente.
La
emisora 2LC comenzó trasmitiendo en la calle Ánimas número 99, entre
San Nicolás y Manrique, que era la vivienda de la familia Casas. A las
9 de la noche se oía el cañonazo y se daba el estado del tiempo,
recibido del Observatorio Nacional, pero en la medida que pasaban los
días se fue ampliando la programación.
En el
testimonio recogido a Luis Casas Rodríguez, hijo de Luis Casas Romero y
también fundador de la radio en Cuba y del embrión que dio inicio a
la actual emisora COCO, explica lo siguiente: “El trabajo en la 2LC
comenzó como un hobby. Hacíamos experimentos de distintas clases en la
radio, entonces trasmitíamos en alrededor de 300 metros en onda media,
poníamos un número musical y pedíamos retroalimentación con los
oyentes. A sus respuestas positivas continuamos aumentando el tiempo
de los experimentos, que fue llevando a mi padre a preparar algunos
programas”.
“Él
hacía de locutor, era quien daba el parte del tiempo y así fuimos
trasmitiendo por largo tiempo hasta que un día decidimos poner más
música y hacer programas más continuados. Entonces poníamos una o dos
horas de música y antes de la hora oficial, 9 de la noche, trasmitíamos
el parte del tiempo. Muchas veces mi hermana Zoila leía algunos cuentos
para los niños, como Pinocho y la Caperucita Roja.
“El
primer noticiero que salió al aire fue el de la emisora 2LC y fue
Luis Casas Romero el primer locutor que se escuchó como tal, y nos
manteníamos desde las 7:00 hasta las 9:15 de la noche,
aproximadamente. Eso fue al principio, después fuimos alargando el
tiempo hasta 5 ó 6 horas diarias, con bastante éxito ya que recibíamos
muchas cartas, llamadas telefónicas y eso nos entusiasmaba”.2
Antes de
la inauguración de la PWX, los norteamericanos que auspiciaban ese
proyecto, trataron de convencer a Luis Casas Romero y su hijo de que
aceptaran trabajar con ellos en la emisora, que inauguró
oficialmente la radio en Cuba, el 10 de octubre de 1922 “a bombo y
platillo”, como bien dijera Oscar Luis López, pero los Casas se
negaron, no obstante le permitieron presenciar por dentro a la
emisora PWX, antes de comenzar su programación oficial.
A los
fundadores de la 2LC no les impulsó ningún motivo político ni
económico, fue sencillamente la afición por la radio, ese nuevo invento
que revolucionaba la técnica de la telegrafía y la telefonía. Objetivo
distinto tuvo la PWX que sí surgía como una necesidad de sus gestores
oficiales de tener un canal de comunicación para divulgar los
adelantos tecnológicos que desarrollaban los grandes consorcios
vinculados a las telecomunicaciones y con proyecciones de utilizarlos
en función de sus intereses propios.
En 1923
no había aparecido ninguna otra emisora, de las existentes en la ciudad
de La Habana, anunciando oficialmente la hora, el estado del tiempo,
los deportes, y las noticias, de forma continuada. En esa etapa la 2LC
llegó a 100 watt.
El 16 de
julio de 1925, la Secretaría de Comunicaciones expidió la licencia
número 23 para trasmitir música y hacer experimentos en telefonía y
telegrafía en onda corta en la banda de 100 metros, y el 9 de marzo de
1927 autorizaron a los Casas sacar al aire la COC emisora de onda
corta, de carácter comercial, aunque le expiden la licencia el 16 de
diciembre de 1933.
Desde
el 22 de agosto de 1922 hasta 1928, fecha en que desapareció, la
emisora 2LC jamás detuvo sus transmisiones salvo el 10 de octubre de
1922, cuando se inauguró la PWX. Entre las muchas innovaciones que hizo
por esta etapa el compositor Luis Casas Romero, se encontraba la
realización de un concurso de participación directa del oyente, que a
través del teléfono llamaba, daba su nombre y cantaba, entonces Luis
Casas Romero pegaba el auricular al micrófono y el participante
escribía y daba su opinión.
A partir
de 1928 Luis Casas Romero y su hijo Luis Casas Rodríguez se
trasladaron a la PWX, el primero como director musical y artístico y
el segundo a cargo de la técnica de la emisora. La estancia de los
Casas en la PWX formó parte de su estrategia para ir preparando las
condiciones necesarias para la salida al aire de la COC, primera
emisora de onda corta en Cuba, cuyo tema musical, de contenido
patriótico, El Mambí resultaba inusual en las emisoras de la
época. A pesar de las ofertas que les hicieron los norteamericanos,
ambos regresaron a su emisora en el año de 1933.
Luis
Casas Rodríguez (cofundador de la emisora COCO)
Nació
el 25 de septiembre de 1906 en Camagüey. Fue el segundo de los cinco
hijos del compositor Luis Casas Romero. Cuando tenía pocos meses su
familia se trasladó a La Habana. Sus primeros estudios los realizó en
el Centro de Dependientes de La Habana, época en que leía cuanto libro
o revista sobre electricidad caía en sus manos y consultaba con todo
aquel que tuviera conocimientos sobre esa materia.
A los
14 años, con los planos correspondientes, armaba y desarmaba los
aparatos de la fábrica de rollos de pianola que compraba su padre.
En1920 se dio a la tarea de fabricar una planta de radioaficionados,
así nació la Q2LC, y en 1925 le sugirió al padre montar la emisora de
onda corta comercial que salió al aire años después como COC. En
1928 pasó a prestar servicios en la PWX. Ese mismo año recorrió la isla
montando los repetidores para suministrar la señal a las plantas
transmisoras, así surgió la primera cadena nacional telefónica en Cuba.
Participó en la inauguración de la planta COCO-CMCK, y durante la
Segunda Guerra Mundial creó una pizarra electrónica, la que mediante
luces en colores señalaba al instante, a la vista del público, los
principales acontecimientos relacionados con esa contienda.
En 1948
participó en la construcción, para la COCO, de la primera unidad
móvil de radio que se empleó en Cuba, la que fue utilizada en
numerosas ocasiones por Chibás y otros revolucionarios en esa época
para denunciar los atropellos del gobierno de turno.
Luis
Casas Rodríguez se jubiló en 1961 pero continuó trabajando en el
antiguo ICR, en el Departamento Técnico creado por el organismo,
ayudando en la formación del personal joven que ingresaba en esa
especialidad, hasta que en 1968 no pudo continuar debido a problemas de
salud. falleció a los 80 años, el 10 de enero de 1987.
APORTE DE LUIS CASAS ROMERO A LAS TRADICIONES PATRIÓTICAS DE LA
EMISORA COCO
La
destacada combatiente y revolucionaria antiimperialista María Luisa
Laffita de Juan, refiere en un testimonio el papel desempeñado por
Luis Casas Romero en la ayuda a los revolucionarios que luchaban contra
la dictadura de Gerardo Machado y cómo utilizaron la emisora COCO en
algunos de los trajines conspirativos. La patriota explicó como en
los años finales de la dictadura machadista Luis Casas Romero,
quien conocía sus actividades, los alertó sobre la mejor manera
de operar para no ser detectados por los agentes del régimen.
En 1934,
cuando los encuentros entre estudiantes examinados y los no
examinados ( revolucionarios) fueron muy violentos, Luis Casas Romero
accedió a que se divulgaran por su emisora las intenciones de
los alumnos plegados al gobierno Batista-Mendieta, quienes estaban
opuestos a que se examinaran los estudiantes revolucionarios.
También cuando en 1939 se hacia campaña para efectuar el Tercer
Congreso Femenino, por parte de las fuerzas de la izquierda, el
Maestro facilitó la emisora, y en los actos más representativos
solicitaban la banda por su conducto y amenizaba con obras
generalmente patrióticas, tales como la obertura Martí, algunas de las
bellas danzas de Cervantes, Lecuona y obras en general de los más
representativos compositores cubanos.
Estas
acciones, unidas a la labor que desarrolló desde aquella época la
emisora en función del pueblo y contraria a los intereses
mercantilistas y foráneos, estuvieron presentes en esta planta de
radio y fueron fuentes de inspiración para los que en posteriores
etapas supieron mantener firmes estos principios de libertad, amor
y justicia.
APARICIÓN DE LA COCO-CMCK
El 16 de
diciembre de 1933 salió al aire la COC, con una potencia de 100 watt,
que pasó a ser en septiembre de 1935 la COCO, debido a ajustes por
convenios internacionales, mientras que la CMCK, de onda media, se
fundó oficialmente el 1ro de noviembre de 1930 por su propietario
Roberto E. Ramírez, ubicándose en la calle Obrapía número 86 y
transmitía en 1 315 kilociclos y 228 metros, con 10 watt de potencia.
Posteriormente, en 1937, se unió a la COCO.
La COC
había surgido como una necesidad de ser escuchada tanto en La
Habana como en el interior. Para que los programas se pudieran oír en
el interior se acudió a las cadenas telefónicas, pero los espacios
resultaban muy caros. En aquella época costaba mensualmente más de 5000
pesos utilizar los cables telefónicos 2 ó 3 horas al día. Entonces,
haciendo distintos experimentos, los Casas llegaron a la conclusión
de que utilizando la onda corta, las señales podían recibirse en todo
el país sin dificultades, así surgió la COC, la primera emisora de
onda corta en Cuba y la primera que trasmitió la música cubana a nivel
internacional.
En 1935
las señales de la COCO se oían en lugares tan distantes como Hawai,
algunos países de África, Venezuela, Colombia, Haití, El Salvador,
Honduras, Guatemala, además de Nueva Zelanda y México.
Entonces
se recibían miles de cartas relacionadas con los programas que
transmitía la emisora, la mayoría de ellos en vivo, con orquestas
clásicas y típicas, lo que los estimuló a continuar aumentando la
potencia de la planta, de onda corta, utilizando la banda de 49
metros, con 6 010 kilociclos.
La COC
se inauguró en la calle San Miguel número 86 (hoy 314). Meses después un
incendio destruyó la emisora y fue necesario adquirir equipos nuevos en
Estados Unidos, para lo cual la firma de tabacos Humara y Lastra, que
anunciaba en la planta, anticipo el dinero para amortizarlo en
propaganda. Entonces se compró un equipo de 300 watt, marca Coleen, y
en septiembre de 1934 ya estuvo en el aire de nuevo la emisora, cuya
potencia fue aumentada a 5 mil watt.
En 1937
se compró una planta de uso en Estados Unidos, de 5 mil watt y se le
añadió a la COCO una onda media, la CMCK. A partir de esa fecha ambas
emisoras trasmitían simultáneamente una intensa programación por onda
media y corta. El público comenzó a llamarla la COCO y esto dio lugar
a una frase que se hizo célebre en la época, lanzada por el popular
actor y escritor Álvaro Suárez, quien al referirse a la clave combinada
COCO-CMCK, en un programa humorístico solía decir “el coco se me seca”.
Entonces
la emisora COCO-CMCK trasmitía 17 horas diarias, en las que la
música cubana estaba dignamente representada por la Riverside y la
orquesta de cámara Cosmopolita, y las orquestas típicas de Cheo Belén
Puig, Fernando Collazo y Neno González. El género cómico estaba
confiado a Álvaro Suárez, Ángel Vilches, Alicia Rico, Popeye el Marino,
Bofito y Fernando, los que con su gracia salpicaban de humorismo las
diferentes transmisiones.
Ya en
el año 1938 la COCO-CMCK había consolidado su programación musical,
humorística e informativa con bailables desde sus estudios y otros
espacios con diversos géneros musicales, fundamentalmente cubanos y
españoles. Se unían a estos, concursos de aficionados diseñados sobre
una sólida estructura para la formación del cantante, sin que los
mismos tuvieran que pasar por traumáticos procesos, como en otras
emisoras, que muchas veces afectaban psíquicamente al aficionado. En
este empeño el director de la COCO Luis Casas Romero, maestro de la
música, pero además, hombre muy preocupado por el aspecto humano y la
formación de los participantes, le imprimía al concurso un sello
verdaderamente educativo.
En
entrevista concedida a la revista Melodías en noviembre de
1938, Luis Casas Romero expresó en cuanto al concurso de aficionados de
su emisora : “Es una idea que decidí llevar a cabo con el fin de
descubrir muchos dotados de condiciones para el cultivo de la música y
el canto, a aquellos que más se distinguen o que más condiciones
demuestran les será ofrecida una beca que les permita ampliar sus
conocimientos.
”Además
se le ofrecerán premios en metálico a los que resulten triunfadores en
cada eliminación. Pero nuestro concurso tiene un desenvolvimiento
distinto al de las demás emisoras. Esto, dicho sin intención de herir
susceptibilidades.
”Todos
los días ensayan aquí 50 ó 60 aficionados, y sólo se presentan al
público después de una rigurosa selección, a aquellos que tienen bien
ensayados sus números y que realmente constituyen un valor en
perspectiva. Con ello se evita que algún aficionado, por el desagrado
del público, tenga que sufrir el bochorno de no poder terminar el
número empezado, y pongo particular empeño en que sean números de música
cubana los que principalmente interpreten”.3
El
Noticiero de la COCO-CMCK llevaba siempre la última información al
oyente, a través de sus cuatro audiciones: de 8 a 8 y media de la
mañana; de 1: 00 a 1:15 del día; de 5:00 a 5 y 30 de la tarde, y de
10:30 a 10:40 de la noche, en cuya última edición se transmitía el
sorteo de beneficencia, directamente desde la Renta de Lotería.
Durante
la década del 40 los noticieros de las emisoras COCO y CMCK se
encontraban entre los primeros de la radiodifusión del país. Una
encuesta hecha en julio de 1940 daba al Noticiero de la COCO un
tercer lugar, detrás de los de las emisoras RHC Cadena Azul y la CMQ.
Por esa etapa la emisora instaló en la calle de San Rafael, entre
Galiano y Águila, un servicio informativo que causó mucha expectación
en la población capitalina, pues allí se colocó un amplio mapa de
Europa, en colores, con relojes marcando la hora de cada país y al lado
un teleprinter que el público podía examinar detenidamente. Miles de
personas acudían diariamente al lugar, para informarse de lo que
estaba ocurriendo en el mundo, en los momentos en que los
acontecimientos, sobre todo en el viejo continente, amenazaban con una
gran conflagración.
También
por esa época, a las 6:45 de la tarde se trasmitía diariamente el
noticiero deportivo titulado Décimo Ining, realizado por el popular
comentarista René Cañizares, el célebre Kañita como le decían, espacio
que gozó de una gran popularidad entre los aficionados del deporte.
EMISORA
MUSICAL INFORMATIVA
PROGRAMAS ESTELARES DE LA COCO-CMCK (finales de la década del 30 a los
años 40)
Por la
COCO desfilaron destacados periodistas de la época, también
escritores como la española Mercedes Pinto, sus hijos Gustavo y
Rubén Rojo Pinto, quienes habían hecho películas en México, como por
ejemplo Un Grito en la Noche. Además, se transmitía Chan Li Po,
un programa de Félix B. Caignet, de corte detectivesco, que lo había
comenzado a interpretar el entonces joven actor santiaguero Aníbal
de Mar, primero en la capital oriental y posteriormente, en el año 1937,
en La Habana.
A
finales de 1938, Aníbal de Mar se encontraba fuera de Cuba y entonces
le recomendaron a Félix B. Caignet al joven Oscar Luis López, a quien
conoció más tarde y quedó maravillado con la interpretación que hizo
el muchacho de su personaje Chan Li Po, y decidió utilizarlo ya en los
finales del año 1938, pero el espacio pasó de la CMK a la COCO-CMCK.
El paso
de Oscar Luis López por la COCO, en su interpretación del personaje
Chan Li Po, dejó huellas imborrables, pues llevó a la emisora a
niveles cimeros de audiencia; ambos, escritor e intérprete, formaron
una sólida pieza para fascinar al oyente tras la ruta de un personaje
enigmático.
Este
joven de elegante vestir y de sencilla palabra, cordial y amable,
cuando interpretaba Chan Li Po en la COCO, ya tenía una formación
sólida y clara perspectiva. Su vida estaría estrechamente vinculada a
la radio como algo inseparable. De esta etapa, cabe detenerse en la
opinión vertida por el propio Oscar Luis López en relación con Félix B.
Caignet y a la oportunidad que este le diera para interpretar su
personaje. En entrevista hecha por Bohemia, de fecha 9 de abril
de 1939, respondió: “Sentí una gran admiración por Caignet y por Aníbal
de Mar desde que se empezó a radiar Chan Li Po en La Habana, pero yo
en mi interior sentía al chino detective de una manera especial...
por eso, al elegirme Caignet para interpretar su personaje, busqué
impartirle mi personalidad sin imitar a nadie e interpretar a Chan Li
Po, tal y como lo siento, y de acuerdo con mis facultades”.
Sobre
una pregunta hecha por el periodista al joven actor, sobre cuál había
sido su más grande emoción en la vida, Oscar Luis López respondió : “Mi
mayor emoción fue cuando Caignet me abrazó diciéndome que estaba tan
satisfecho de mi interpretación de Chan Li Po como lo estuvo de la que
le hiciera Aníbal de Mar —y añade— pero eso no me ha enardecido, ni me
ha dejado conforme. Yo creo que no he llegado todavía y que cada día
puedo hacerlo mejor para corresponder a las amabilidades del pueblo”. A
una pregunta de que si el incipiente actor era oriental, Oscar Luis
responde: “No señor, aunque así se ha publicado no soy de Oriente. Nací
y me crié en La Habana. Ahora bien, soy de Oriente, porque forma parte
de Cuba, cubano, que es como debemos ser, sin regionalismos”. Oscar Luis
López interpretó a Chan Li Po hasta el año 1941.Todo este tiempo por la
COCO.
En la
emisora actuaron también reconocidos intérpretes de la época como el
mexicano Ortiz Tirado, Aquilino y su Cuadrilla, una banda de pasodobles
españoles. Aquilino tocaba el saxofón y tenía discos grabados de la RCA
Víctor, entre ellos el pasodoble Ermundo. También por esos años
actuó , Lina D. Costa, notable cantante mexicana que, tras de haber
sido presentada por el maestro Lecuona actúo en los programas de la
radioemisora COCO, acompañada por el propio Lecuona.
También
actuó por aquella época en la COCO, Agustin Godoy, destacado tenor
vizcaíno, autor de la melodía Cañaveral; el maestro Gonzalo
Roig; la Orquesta Filarmónica; La Coral de La Habana y el coro de la
Beneficencia, con los directores Amadeo Roldán y María Muñoz de
Quevedo.
Asimismo
la destacada cantante Dulce María Blanco; Margot Terraza, también
actriz, quien participó en la filmación de varias películas cubanas;
el trío Avileño, compuesto por los aplaudidos artistas Francisco
Montero, Antonio Martínez y Clodualdo Valle; la cantante gallega Alicia
Rico, del teatro criollo y Ángel Vilches, dos actores cómicos que día a
día cosechaban grandes aplausos; la cantante Zoraida Marrero,
intérprete de la canción criolla, quien comenzó en el concurso de
aficionados de la Cadena Crusellas, que se radiaba por la COCO.
Resulta
necesario destacar el protagonismo de la orquesta de Cheo Belén Puig,
desde los estudios de la COCO, espacio que contó siempre con una
extensa audiencia, y de la orquesta Chic, dirigida por el maestro
Dihigo, integrante de la orquesta Cosmopolita; Tomasita Nuñez, soprano
de exquisita voz, quien poseía una formidable escuela de canto; los
cantantes Oscar Lombardo, tenor de magníficas condiciones vocales,
quien fue miembro de la Ópera Nacional e interpretó la romántica ópera
de Verdi, Traviata, desde el Auditorium y figuró también en la
filmación de películas como Siboney, entre otras. La cantante
solista Isabelita Elías y el Maestro Asan Juan, que amenizaban los
estelares conciertos Fleischmann .
Mención
también merece Alfredito Valdés, el destacado cantante de la orquesta
Cheo Belén Puig; la popular cancionera María Ciérvide, doctora en
Medicina; Práxedes Pérez intérprete de la disertación poética;
Panchita Trigo, aplaudida intérprete de canciones populares, que
surgió en el concurso de aficionados que la Cadena Crusellas sostuvo en
la COCO, en la que obtuvo el primer premio interpretando la canción
Mi Sueño eres Tú, de Ernestina Lecuona; Fernando Fernández, cantor
mexicano quien actuó en Cadena Crusellas; así como el admirado cantante
mexicano Pedro Vargas; el trío Alma Criolla, espacio de 1:15 a 2:00 de
la tarde por la COCO; el cantante René Cabell, Georgina Dubouchet;
Abelardo Barroso, intérprete de genuina estirpe popular, con la
orquesta Maravilla del Siglo (con carácter exclusivo), de 2:00 a 3:00 de
la tarde en Melodías Populares; Adolfo Guzmán actuaba en el Trío
Internacional, que interpretaba interesantes canciones nacionales y
extranjeras.
También
actuaron en la COCO protagonistas de las comedias como: Tomás Cuervo,
imitador del Gordo y el Flaco, y otros conocidos cómicos
norteamericanos, en el programa de la Cadena Crusellas.
La
popular cantante y actriz Rita Montaner, intérprete destacada de los
más típicos ritmos cubanos, actuó por mucho tiempo en la Revista
Llave del Aire, de la COCO; la soprano Hortensia Coalla y el tenor
Panchito Naya, intérpretes de la revista de contenido patriótico
titulada “El Clarín”. La popular orquesta Cosmopolita, con sus
actuaciones diarias a las 8:30 de la noche.
Entre
los compositores e intérpretes que trabajaron por aquella época para la
emisora COCO, se destacaron: Obelleiro Carvajal, con sus obras
Cañaveral, estrenada en la revista Llave del Aire, interpretada por
Nenita Viera, Oscar Lombardo y Oscar Luis López. También la famosa
cantante y acriz Rita Montaner interpretó sus obras. Antonio Torres y
Caridad Bravo Adams, escribían el guión de la revista musical Perla
del Trópico, en la mencionada revista Llave del Aire
Espacio
aparte merece el destacado escritor Félix B. Caignet, autor del
célebre personaje Chan Li Po, el chinito Fu Chi Lan, interpretado por
Orlando Rodríguez, joven descubierto por el propio Caignet. Este
célebre escritor nacido en Santiago de Cuba interpretó por primera
vez al personaje Chan Li Po en su ciudad natal, en donde disfrutaba ya
de un nombre como periodista, poeta y compositor, y también como creador
de programas radiales.
En
1936 Caignet decidió trasladarse a La Habana, donde ya se conocían sus
canciones Te Odio y Frutas del Caney y sus poesías: Me
voy de flirt y Un Despojo. También se conocía en la capital
su libro de poemas líricos Gotas de Ajenjo. Pero a la conquista
de La Habana venía Caignet como escritor radial, a solicitar un lugar
en la radiodifusión habanera, pues en la modesta maleta traía su Chan
Li Po.
“Los
primeros tiempos de Félix B. Caignet en La Habana fueron más que
difíciles, riesgosos e insostenibles. Otro hombre de voluntad menos
tesonera que la de él hubiera abandonado la lucha. Nadie se interesaba
por Chan Li Po, y en todas partes recibía como respuesta a su solicitud,
negativas terminantes y a veces un poco burlonas. El director de una
destacada audición radial, que en aquella fecha se encontraba en la
cima de la popularidad llegó a decirle: ‘Qué bien se conoce que usted
es del campo. Esos episodios, amigo mío, están bien para publicarlos en
el interior; pero en La Habana nunca podrán tener éxito’ Así reza en un
extenso artículo de Armando Rosales publicado en la revista
Melodías en el año 1939 ”.4
En
realidad, Caignet no pedía más que una oportunidad; mientras tanto
actuaba en un programa que se radiaba en la emisora COCH titulado La Voz
de las Provincias y dirigía también los domingos en la emisora COCO
unos conciertos musicales, en los que solo se trasmitían canciones
suyas.
Tras
mucho batallar, insistir y rogar, al fin encontró Caignet a una
emisora que decidiera llevar a su onda los episodios de Chan Li Po.
Fue Félix O. Shea, de la CMK, quien no muy seguro del éxito proporcionó
sus micrófonos al detective chino. Contaba al fin Caignet para llegar
hasta los oyentes con su Chan Li Po, pero el éxito todavía no estaba
conseguido, era el público quien tenía que decir la última palabra.
Al cabo
de 30 días de prueba en la emisora CMK, el detective chino se había
convertido en la comidilla de la ciudad. Por aquellos tiempos apenas
sonaban las ocho de la noche, todo el que tuviera un radio giraba el
dial de su receptor en busca de la onda de la CMK para emocionarse con
las aventuras truculentas y chispeantes del detective chino creado por
Caignet. En los anales de la radiodifusión cubana los episodios de Chan
Li Po marcaron el primer acontecimiento artístico de valía, ningún
programa había conquistado antes con tanta absoluta plenitud, la
atención del público oyente.
Luego
de ocho meses de éxito en la CMK, diferencias surgidas lo obligaron a
dar por terminadas allí las transmisiones de Chan Li Po. Antes,
aprovechando el triunfo sin precedentes de su personaje, hicieron la
primera película sonora, La Serpiente Roja, con relativo éxito.
Entonces embarcó para Nueva York donde hicieron varias transmisiones
con el personaje Chan Li Po para el público latino, que tuvieron
también éxitos.
Allí
Caignet obtuvo un contrato de la Bristol Meyers para hacer Chan Li Po
durante seis meses en Buenos Aires, por lo que le cabe a Caignet el
inmenso honor de presentar el primer espectáculo de la radio cubana en
el extranjero, pero lamentablemente en la ciudad bonaerense Chan Li Po
no tuvo éxito alguno debido a que episodios escritos para media hora
fueran trasmitidos en ocho minutos, perdiéndose naturalmente, por la
fuerza de la síntesis su mayor parte de emoción, y aunque su Chan Li Po
no triunfó en Buenos Aires, si su música fue una llave que le ofreció
todas las puertas en aquel país.
De
regreso a La Habana, inició en la COCO la segunda etapa de su Chan Li
Po, en la que hubo de conquistar nuevamente la atención del público
oyente, teniendo como título del gran éxito en este nuevo ciclo a:
El Monstruo de la Sombra. Para su nuevo Chan Li Po, contó Caignet
con Nenita Viera, Antonio Valladares, Luis Manuel, Celio Adams y Jesús
Alvariño, pero el éxito de su nuevo Chan Li Po estuvo en el papel que
hizo un joven desconocido en la radio, Oscar Luis López, de quien dijo
Caignet que además de ser una excelente persona, interpretaba a Chan Li
Po no imitando a nadie, sino de acuerdo con su propia concepción del
personaje.
Fue en
la revista Llave del Aire donde tuvo la nueva interpretación del
personaje Chan Li Po un rotundo éxito. Chequeada cuidadosamente por sus
directores, se oía en todos los rincones del país.
Caignet
fue creador de 370 composiciones musicales y trabajó en un proyecto
de atracción al turismo que se llamó La Feria del Ritmo Cubano.
También incursionó en el cine con varios argumentos, entre ellos: La
madre de todos, que es un canto a la tierra cubana; Soy cascabel,
comedia musical; Barracón, drama lírico social y La Carcajada
de Champán, gran revista musical. Sobre este espacio la revista
Melodías escribió en mayo de 1939:
“La
revista Llave del Aire, fiel a su norma de ofrecer frecuentemente a la
gran legión de sus admiradores adaptaciones radiofónicas de las mejores
obras del repertorio lírico nacional, llevó a sus micrófonos, el
pasado viernes, la conocida comedia lírica de José Sánchez Arcilla y
Rodrigo Prats, titulada Marío Belén Chacón, adaptada por Raúl Du
Breuil y dirigida por el propio autor de la parte musical, Rodrigo
Prats, al frente de una gran orquesta de 30 profesores, la radiación de
María Belén Chacón, constituye un sonado éxito de la revista
Llave del Aire”.5
Por
aquellos años la revista Llave del Aire, estaba patrocinada por
Sabatés. y en ella alternaban las orquestas de primerísimo cartel como
La Chic del Maestro Dihigo; la Cosmopolita y la de los hermanos Castro,
la actuación del maestro Rodrigo Prats. También actuaron en este
espacio Alicia Rico, Álvaro Suárez y Ángel Vilches interpretando
comedias; la Microcharla del polifacético Félix B. Caignet y cantante
como Tomasita Núñez, en el estudio-teatro de la emisora COCO-CMCK.
También se presentaban los sketchs de Los Llaveros en
aventuras Fernando y Torniquete, creados por Caridad Bravo
Adams y Luis Martínez Casado .
Asimismo actuó Jesús Alvariño dentro del espacio Llave del Aire, y se
radiaban los concursos de dibujos para colorear. Eran unas fiestas
llenas de animación a las que asistían miles de niños, en las que se
presentaron espectáculos con los personajes infantiles Popeye El
Marino, Don Chucho, Peluza y el Hombre Fuerte.
También se trasmitieron en el espacio la compañía infantil de Roberto
Rodríguez y se repartían golosinas y refrescos para los niños. Esos
espectáculos radiales los patrocinaba la firma Sabatés. La Llave del
Aire se trasmitía diariamente de 8:00 a 9:00 de la noche por la COCO y
se escuchaba en toda la isla, con una alta audiencia.
Un
espacio de reconocida calidad por su diseño y el brillo de sus
actuaciones fue el espacio Levadura Fleischmann, que se radiaba
todos los viernes, de 9:00 a 10:00 de la noche por la emisora COCO-CMCK,
en cadena con las emisoras CMCY, CMK, CMBF, CMQ, y COCQ. El espacio
lo dirigía Isabelita Elías, soprano y realizadora, y consistía en
conciertos de ópera en el que actuaron los destacados intérpretes Oscar
Lombardo, Pedro San Juan, Alberto Roldan y otros.
El
programa Cadena Partagás, se trasmitía de 12:00 del día a la 1:00 de
la tarde, en cadena, por las emisoras CMAB de Pinar del Río, CMHP, de
Santa Clara y CMJW de Camagüey ; el espacio titulado Hora Popular, que
se radiaba a las 12:00 del día y en el que participaban artistas de los
méritos y popularidad de María Marcos Marcel Domínguez.
En el
espacio antes mencionado debutó en Cuba en noviembre de 1939 el
famoso barítono y actor de cine, el mexicano Jorge Negrete,
quien llegó a Cuba invitado por el ilustre compositor Eliseo Grenet.
Ambos hicieron su aparición en el programa Cadena Partagás el domingo
3 de diciembre de 1939. En esta ocasión Eliseo Grenet hizo la
interpretación de su zarzuela La Virgen Morena, que había
triunfado ampliamente en España, donde tuvo que interpretarla en
muchas ocasiones. Negrete ya había triunfado en Broadway, y se había
iniciado en el cine con el filme de la Warner Bros, titulado Noches
de Cuba.
También
en ese espacio de la COCO actuaron por aquella época los
conjuntos Riverside y Partagás, así como los actores cómicos Álvaro
Suárez, Ángel Vilches y Alicia Rico. El programa contaba con el popular
animador Humberto de Dios, Aurora Lincheta; la popularísima intérprete
de la canción afrocubana Georgina Oliva, y; Rosita Fornés quien ya
comenzaba su brillante carrera artística.
En la
COCO también actuaron por aquella época Fernando Collazo, el decano de
los cantantes de orquestas cubanas, dirigiendo su agrupación
Maravillas del Siglo, cuyo espacio obtuvo una amplia escucha, Caridad
Bravo Adams, figura muy conocida en la música popular de entonces.
Por las
tardes diariamente se trasmitía de 3:30 a 4:00 de la tarde, un
programa dedicado a la mujer, patrocinado por el jabón Camay. El espacio
contaba con el concurso de la escritora María Julia de Lara y el tenor
Mario Ruiz, con el acompañamiento del pianista Vicentico Lanz. Otro
espacio que gustó mucho, dentro de la revista Llave del Aire fue la
celebrada parodia del Tenorio, protagonizada por Raúl Du-Breuil,
locutor versátil y guionista de sketchs, diálogos y pasillos
cómicos. Du Breuil también tomó parte en los episodios Chan Li Po ;
la popular cantante Rita Montaner, quien actuó durante una temporada
por la revista Llave del Aire. Rita fue despedida precisamente en este
programa antes de partir a su exitosa gira por Venezuela y otros
países latinoamericanos; la Hora Ibérica, que se trasmitía a las 7:30
de la noche, popular espacio en el que actuó el notable tenor vizcaíno
Agustín Godoy. La Rondalla Ibérica, —agrupación que contó con la
afamada cantante de Sevilla Obdulia Feijó— era un programa de música
española que se trasmitía a las 9:00 de la noche y en el que actuó
entre otros Rosita Fornés.
También
se trasmitía música campesina, ejemplo de ello fue el programa de
melodías guajiras titulado El Bohío Cubano, espacio que auspiciaba el
cigarro Partagás con la competencia del Bando Azul y el Tricolor. El
Bando Azul lo dirigía José Sánchez León y el Tricolor el célebre
trovador Fortún del sol (conocido por Colorín). El espacio de música
campesina lo dirigía Justo Vega salía al aire a las 11:00 de la
mañana con una hora de duración, de lunes a sábado.Este espacio alcanzó
una gran audiencia, porque Justo introdujo innovaciones radiales que
tuvieron una magnífica acogida popular, como El Correo del Amor, en el
que, mediante correspondencia dirigida a la emisora los jóvenes podían
intercambiar cartas y conocerse personalmente. Este espacio fue motivo
de muchos y felices matrimonios.
Según el
testimonio del repentista Adolfo Alfonso ese programa tuvo una gran
audiencia, sobre todo campesina, y en ocasiones se realizaba en otras
ciudades del país. La competencia del programa, además de las
controversias entre los trovadores, consistía en quien aportaba más
cajetillas de cigarros (Partagás) vacías. Era el gancho de los
patrocinadores para vender su mercancía.
El Bando
Azul estaba integrado por José Sánchez León, Antonio Camino, Ángel
Valiente, Agustín Pérez Calderón, Adolfo Alfonso, y Cleofé Yizo;
mientras que el Bando Tricolor estaba compuesto por: Fortún del Sol,
Rigoberto Rizo, y José Marichal, entre otros. Todos repentistas.
También
el destacado poeta y otrora repentista Jesús Orta Ruiz, El Indio
Naborí se inició a pincipios de 1940 en un espacio en el que
cantaba en una controversia diaria junto al trío Pinareño, con Fortún
del Sol , espacio que ganó gran popularidad. El éxito del Indio Naborí
y Colorín fue el resultado de su activo protagonismo en el citado
programa que se trasmitía de lunes a viernes, de nueve a diez de la
noche.
“Tengo
gratos recuerdos de la COCO porque allí hice mi primer programa y
gané mi primer premio literario cuando cumplía un año de mi
participación en el espacio Una Hora en mi Bohío —expresó Jesús Orta
Ruiz, quien agregó: Después trabajamos con el compañero Guido García
Inclán durante algunos años, a quien mucho admiré, y recuerdo las
intervenciones del luchador revolucionario Juan Manuel Márquez,
espacio al que yo apoyaba con versos políticos. Luego del triunfo de
la Revolución también participé en programas recitando poesías
políticas”.6
De
acuerdo al testimonio de María Luisa Casas Rodríguez, hija de Casas
Romero, por esa época la emisora COCO-CMCK realizaba un noticiero
diario que salía a las 9 de la noche con una duración de 15 minutos, en
el que se daban las últimas noticias de carácter nacional e
internacional, teniendo como locutores a la propia María Luisa y a
Jesús J. López. La Cadena Crusellas era un concurso de aficionados
que patrocinaba esta firma comercial y se radiaba por la COCO.
Por
aquel entonces la revista Melodías también publicó varias notas
referidas a distintos programas de la emisora COCO. En una de ellas
decía:
“El
concurso de aficionados que la Cadena Crusellas sostuvo en las populares
emisoras COCO y CMQ, dotó a nuestro mundo artístico de distintas figuras
que, con el correr del tiempo, vieron aumentar sus prestigios hasta
obtener un señalado lugar en el aprecio de nuestros radioescuchas”.7
Refiriéndose a la revista Llave del Aire, el órgano portador de la
música expresaba:
“La
Revista Llave del Aire, fiel a su norma de ofrecer frecuentemente a la
gran legión de sus admiradores adaptaciones radiofónicas de las mejores
del repertorio lírico nacional, llevó a sus micrófonos el pasado
viernes la conocida comedia lírica de José Sánchez Arcilla y Rodrigo
Prats, titulada María Belén Chacón, adaptada por Raúl Du Breuil y
dirigida por el propio autor de la parte musical, Rodrigo Prats, al
frente de una gran orquesta de 30 profesores, la redacción de María
Belén Chacón, constituye un sonado éxito de la revista Llave del Aire”.8
En ese
extenso artículo, la mencionada revista agregaba:
“Muy
escuchado viene siendo el Noticiero Relámpago de las emisoras cubanas
COCO-CMCK con quince minutos que nos dan a conocer las noticias más
importantes y de más interés ocurridas durante el día. En la emisión
de las 10 y 15 de nos ofrece como complemento de su labor informativa
los números del sorteo de Beneficencia, en el mismo instante en que
son contados por los niños de esa institución”.9
En la
emisora COCO-CMCK también se trasmitían maratones radiofónicos como
el realizado en la Manzana de Gómez, ocasión en la que permaneció
durante 94 horas consecutivas hablando ante el micrófono Manuel
Andréu (hijo), récord que fue roto por Carlos Pandolfo en un segundo
maratón celebrado posteriormente. También se trasladaban a las
localidades del interior los programas, como en el caso de la revista
Llave del Aire, que se hizo en la cabecera del municipio Guanajay,
perteneciente entonces a la provincia de Pinar del Río.
En enero
de 1944 se publicó en la revista Radio Guía una nota que decía
textualmente:
“Una
nueva audición de la COCO, que ha llamado poderosamente la atención por
sus grandes ofertas; la manera más fácil de conseguir empleo, hallar lo
perdido o devolver lo encontrado, servicios que se realizan con sólo
llamar al M-6662. Un programa de utilidad social que conduce Ventura
Lemus y que diariamente, excepto los domingos, presenta Radio América a
las 9 de la mañana. —y prosigue el autor del trabajo— Radio América ha
designado a Carlos Basilio, director de la cadena de programas
dominicales de la COCO con estas audiciones semanales en las que se
presentan las más destacadas figuras de la nueva hornada artística,
siendo todos acompañados por el conjunto Radio América”.10
En otro
momento la propia revista Radio Guía expresaba: “Cada día se
escucha más La opinión de la Calle en la voz de la COCO, donde se
enjuicia con sensibilidad todo cuanto dañe moral o materialmente al
pueblo cubano: su creciente popularidad ha exigido una nueva emisión,
ahora audible a las 9:15 de la mañana y a las 7:45 de la noche..."10
Ello es
un ejemplo de lo que ha significado la constancia y continuidad de
este tipo de programación de facilitación social que se ha mantenido
a lo largo de gran parte de la existencia de la emisora COCO.
Respecto
al deporte, desde los años 30 se radiaba la página de sport del
periódico Alerta, que comenzaba a las 7:15 de la tarde todos
los días a excepción de los domingos. En ese espacio se trasmitían
temas relacionados con los distintos deportes preferidos por el público
cubano y también se ofrecía el resultado completo de los juegos
diarios de las grandes ligas. En el espacio había una sección que se
titulaba “Hablando de Pelota”.
Comentario aparte requiere el espacio conocido por La Asamblea
Popular, valioso espectáculo realizado en los estudios de la COCO y
CMCK y se trasmitió en cadena con la CMQ. Gracias a este espacio,
importantes figuras políticas, sociales y culturales de la vida
nacional se dieron cita en el mismo para ofrecer sus criterios o
informar acerca de candentes temas de la actualidad. Este patriótico
espacio, dirigido por la célebre escritora Mercedes Pinto, gozó de gran
popularidad y en él tuvieron brillantes piezas oratorias.
En un
artículo publicado en la revista Radio-Guía correspondiente al
mes de agosto de 1941, se expresó en reconocimiento a ese espacio lo
siguiente:
“La
Asamblea Popular, por tanto, está realizando en estos momentos una
trascendente labor histórica. Está llamando con voces de patriotismo y
de confraternidad a todos los corazones y está tratando de cimentar
sobre bases sólidas e indestructibles, la libertad de Cuba”.11
LA
COCO-CMCK, FUE EN SU PRIMERA ETAPA UNA EMISORA FAMILIAR
Desde
sus inicios como emisora COC de onda corta y más tarde COCO-CMCK y
prácticamente hasta el año 1947, esta planta tuvo un carácter
familiar, puesto que su cuerpo de realización estuvo compuesto por los
Casas, padre e hijos y demás familiares. La composición del personal
que laboraba en la planta por aquella época era el siguiente: Luis
Casas Romero: director y locutor; Luis Casas Rodríguez, técnico; Zoila
Casas Rodríguez (en un principio), leía cuentos infantiles; María
Luisa Casas Romero: locutora (fue la primera mujer locutora en Cuba);
Graciela Casas Romero: trabajaba en la oficina de la emisora, en la
redacción de libretos y otros menesteres; Ernesto Casas Romero: locutor
en español e inglés; Aída Casas Romero: miembro del cuadro de comedias
de la emisora, actuaba como actriz. También un nieto de Luis Casas
Romero, Luis Ángel Casas, dirigía el cuadro de comedias
infantiles.
LA
COCO EMISORA NACIONAL CON ALCANCE INTERNACIONAL
El hecho
de contar la emisora COCO-CMCK, con onda corta y media, permitía que
se escuchara su programación en todo el país e internacionalmente, es
decir , con un alcance integral que no poseían muchas emisoras en aquel
entonces (años 30). Unido a esto, la programación variada y amena,
matizada con música cubana con agrupaciones destacadas, programas
humorísticos, música campesina e informativos, incluidos los sorteos
de la Lotería Nacional, y la programación de humor. Estos elementos
dieron a esta emisora una audiencia destacada que la ubicaron entre
las primeras escuchadas del país.
Ya
desde el inicio de la década del 40, las emisoras cubanas COCO y
CMCK, como se llamaban entonces, tenían que competir con potentes
soportes de la Radio, como el Circuito CMQ y RHC Cadena Azul, empresas
radiales dotadas de grandes recursos y poderosos anunciantes que
les pertimitían atraer a las mejores figuras artísticas, del
ámbito nacional e internacional; no obstante la emisora COCO
mantenía una amplia programación tanto en onda corta como en onda
larga, los que se trasmitían con elevada calidad y creatividad. Por
esa época actuaron agrupaciones musicales como El Casino de la Playa,
se mantuvo la orquesta Maravillas del Siglo, con Abelardo Barroso, el
conjunto de Arsenio Rodríguez, el conjunto del Trópico y otros, mientras
la revista Llave del Aire mantenía entre sus ofertas a la estelarísima
Orquesta de Cámara Cosmopolita.
Otros
espacios mantenían en vivo la audiencia como la serie de episodios en
los que el protagonista principal era el intrépido Capitán Maravillas,
que se transmitía diariamente a las 12:00 del día y que resultaba un
espectáculo lleno de emoción e intrigas.
También
se transmitía una mesa redonda dirigida por Mercedes Pinto y que se
radiaba a las 7:00 de la noche y otro espacio que contó con mucha
audiencia fue el programa La Opinión de la Calle, que se presentaba
todos los días, excepto los domingos, a las 7:15 de la tarde y en él
se exponía todo cuanto inquietaba al pueblo cubano, basado en
opiniones de las personas en la calle sobre temas de actualidad. Era
un espacio al servicio del pueblo.
Testimonio de Evelio Sánchez Pérez
“En
1943 me motivó entrar en la radio una emisora que existía en la
calle San Miguel que se llamaba CMBX, Radio Álvarez, de corte
auténtico. Allí escribí algunas notas en esa emisora en defensa del
partido Auténtico que al director le gustó y me quedé colaborando con
la misma. Tenía entonces 17 años.
“Radio
Álvarez tenía un noticiero que se llamaba La Voz del Autenticismo, pero
la planta sólo se oía en La Habana y algunas poblaciones cercanas,
entonces observé que en la propia calle San Miguel, entre Nicolás y
Rayo, había también otra emisora mucho más grande, con un letrero
transversal que decía COCO-CMCK.
”La
emisora tenía un buen teatro y allí empecé a trabajar como locutor sin
título, después lo obtuve tras un examen, extendido por el Ministerio
de Defensa Nacional, en diciembre de 1944. Se transmitían entonces en
la COCO las actuaciones de la banda de conciertos dirigida por el
propio propietario de la emisora y fundador, capitán Luis Casas
Romero.También se transmitían programas extraordinarios, uno de ellos en
la revista Llave del Aire, que consistía en un programa artístico con
la orquesta Cosmopolita dirigida por Vicente O. Diana.
”Los
locutores eran: Ernesto Casas, hijo del propietario, Raúl Du Breuil y
otros. Había programas históricos, dramatizados, radio teatro, donde
trabajaban los actores y allí asistía el público. Existían también
programas campesinos y La Asamblea Popular.
”Por la
COCO desfilaron grandes personalidades artísticas de la época y
escritores como Mercedes Pinto (española), sus hijos Gustavo y Rubén
Rojo Pinto, que hicieron películas famosas en México, como por ejemplo
Un Grito en la Noche. Recuerdo también al locutor Ortiz Tirado,
famoso médico mexicano que fue cantante y era quien anunciaba la pasta
dental Ipana, y comenzaba cantando, ‘Esas perlas que tú guardas con
cuidado en tan lindo estuche rojo (...)’ y luego decía, gracias a la
pasta dental Ipana.
”Uno de
los aspectos más importantes de la emisora COCO fue el debut de
notabilísimos artistas extranjeros, que después fueron famosísimos
como: Aquilino y su Cuadrilla, una banda de pasodobles toreros, así
como el debut en Cuba de Jorge Negrete.
”Lugar
destacado caben los episodios de Chan Li Po, que escribía Félix B.
Caignet e interpretaba Oscar Luis López. Este espacio tuvo una gran
audiencia nacional, pues mucha gente paraba en sus quehaceres para ir
el programa, que era patrocinado por la pasta dental Ipana, el
desodorante Mum y la sal hepática.
”Lógicamente, antes de ser trabajador fui oyente de la COCO, como hubo
miles desde aquella época, es decir, desde la década de los años 30, lo
que me facilitaba tener las vivencias de aquella programación,
anterior a 1943”.12
En
septiembre de 1939, se efectuó una reunión a la que asistió el
capitán Luis Casas Romero, director de la COCO-CMCK y a la vez
Presidente de la Delegación del municipio de La Habana, previa al
Congreso Internacional de Música que se celebraría en Nueva York unos
días después, sobre la urgente necesidad de modificar los programas
que se radiaban en las emisoras comerciales, en vista de que casi todas
dedicaban excesivo tiempo al espacio comercial, con perjuicio del
artístico, por lo que se daba el caso de que el radioescucha tenía que
soportar pacientemente la repetición excesiva de los anuncios en un
mismo programa.
En dicha
reunión se acordó que en lo sucesivo solo se dedicaría el 10 por ciento
del tiempo de cada programa a la divulgación del anuncio.
LA COCO
PASA A MANOS DE JULIO CÉSAR GONZÁLEZ REBULL
Encontrándose la emisora COCO-CMCK en la calle Lealtad, se produjo la
venta de la planta a Julio César González Rebull, propietario en
aquel entonces del diario El Crisol, que funcionaba en los
bajos del edificio, y en los altos estaba la emisora.
Por
esa etapa la programación de las emisoras COCO-CMCK incrementó su
matiz comercial, aunque continuaron los espacios con música variada y
noticiosos. Se trasmitía un programa a las 12:30 del día, con una hora
de duración, con días marcados para Argentina, México España y Estados
Unidos. Se continuó trasmitiendo los sorteos de la Lotería Nacional y la
Hora Crusellas, a las 6:00 de la tarde en cadena con la CMQ, que
consistía en un espacio variado y los domingos, a las 8:00 de la noche,
se continuaba trasmitiendo el concierto de la Banda de Música del
Cuartel General del Ejército Constitucional, dirigida por el maestro
Luis Casas Romero.
En 1947
los programas deportivos que trasmitía la COCO adquirieron mayor auge,
con la incorporación de la transmisión del campeonato profesional de la
Liga Cubana de Béisbol, y a ella se unió la transmisión de la liga de
La Florida, en la que jugaban los llamados Havana Cubans y la de los
equipos de Grandes Ligas. Estos últimos en horarios de la tarde y los
primeros en horarios de la noche. Estas transmisiones eran narradas y
comentadas por Felo Ramírez y Cuco Conde (ambos abandonaron el país
luego del triunfo revolucionario).También había un espacio que se
llamaba Lucky Seventh, con las últimas noticias deportivas, a cargo de
Pedro Galiana (también se marchó del país) y se trasmitía de 7:00 a 7:30
de la noche. Asimismo se radiaban eventos del béisbol amateurs y de
otras especialidades deportivas. Por aquella época la COCO tenía como
slogan “La Primera en Deportes”.
Eran los
tiempos en que afloraba ya el germen de la división del movimiento
obrero, al compás de las posiciones que tomaba Estados Unidos en
relación con la Unión Soviética y el movimiento comunista
internacional.
Ocupaba
la primera magistratura del país, Ramón Grau San Martín, hombre
vacilante y dubitativo y con marcada tendencia de hacer trizas la unidad
del movimiento obrero, aunque en ocasiones sus discursos decían lo
contrario. En este contexto, en marzo de 1947 se produjo una
entrevista al líder de los trabajadores Lázaro Peña que hizo por los
micrófonos de la COCO un periodista que ya afloraba con su dosis de
oportunismo, pero hábil en la profesión, José Pardo Llada (abandonó el
país en 1961).
El
interrogatorio tenía que ver con la situación del movimiento obrero y
las amenazas de división en el seno del mismo, vísperas del V
Congreso de la organización proletaria. A una pregunta de Pardo Llada
respecto a si al líder obrero albergaba alguna aspiración personal,
Lázaro respondió: “Aunque no tengo ninguna aspiración personal, las
únicas personas que se ocupan en preguntarse y responderse a sí
mismos, si yo resultara reelecto como Secretario de la CTC, son los
divisionistas en particular y la reacción en su conjunto. Iré al próximo
congreso obrero simplemente como un delegado del sindicato de
Torcedores. El Secretario será aquel que la mayoría considere más capaz
para resolver sus propósitos”. Refiriéndose al intento de organizar a
los llamados obreros independientes, dijo Lázaro: “El intento es
fraccionalista y perjudicial al interés unitario”. La entrevista fue
publicada también en el diario El Crisol el día 19 de marzo de
1947.
PUGNA
POR LA EXCLUSIVIDAD
Por
aquella época, la emisora COCO enfrentaba a otras plantas en cuanto a
la exclusividad en la narración de algunos deportes, incluido el
béisbol. Ya la emisora se identificaba como una onda deportiva, con
derecho a transmitir eventos deportivos y campeonatos nacionales e
internacionales; pero otras emisoras le disputaban a la COCO esa
exclusividad. En una nota aparecida en la revista Bohemia en
noviembre de 1947 se expresaba:
”Amado
Trinidad, máximo propulsor de la RHC-Cadena Azul y CMW Cadena Roja y
los dirigentes de la COCO se hallan en estos momentos frente a frente
en belicosa actitud. La manzana de la discordia: la transmisión
exclusiva del campeonato auspiciado por la Liga Nacional de Béisbol
Profesional de Cuba.
”Los
acontecimientos que han dado lugar a este estado de cosas, tienen su
génesis el pasado mes de septiembre cuando los de la COCO no
verificaron cierta determinante cláusula económica que aparecía en el
contrato firmado por ellos en el mencionado organismo, ni tampoco a
juicio de este cumplieron otro relacionado con la publicidad que,
desde sus micrófonos debían brindarle al espectáculo de la Tropical.
“En
junta celebrada al efecto, los integrantes de la Liga Nacional
decidieron romper el compromiso con la COCO y basaban la decisión en
que la empresa radial no había observado el contrato firmado...”13
Lo
anterior es un ejemplo de la fuerte disputa de intereses que entonces
era notorio entre los dueños de plantas y que en esa ocasión no le
fue favorable a la emisora COCO.
Desde el
punto de vista comercial la firma de los cigarros Trinidad y Hermano
ocupaba un lugar destacado en los anuncios, junto a la Crusellas, el
ron Bocoy y el cigarro Partagás, entre otros.
13
Sección radiofónica de la revista Bohemia. Noviembre de 1947, p.
40.
En el
orden político un ministro de Grau en charla especial en su hora
radial programada “denunciaba” la actitud asumida por los señores
cebadores que se negaban a vender su ganado apto para el sacrificio.
GUIDO
GARCÍA INCLÁN ADQUIERE LA COCO
El 26 de
enero de 1948 el periodista Guido García Inclán adquiere las emisoras
COCO y CMCK, pertenecientes a la Compañía Radio Difusora COCO,
propiedad de Julio César González Rebull y Alfredo Isaguirre Hornedo.
Sus antiguos propietarios cedieron a Guido García Inclán todos los
derechos, propiedades y acciones de las mencionadas plantas. Dos días
más tarde, el 28 de enero de 1948, Guido fundó El Periódico del Aire,
una institución de periodistas al servicio del pueblo cubano. Resulta
significativo que el ya destacado profesional de la prensa radial y
escrita, comenzara el nuevo diseño de programación de la emisora
COCO un 28 de enero. Guido, martiano por excelencia y revolucionario,
ya había roto con el autenticismo y se había unido a Chibás.
Por
aquel entonces Guido libraba una tesonera batalla para obtener una
tumba digna para el Apóstol José Martí en el cementerio de Santa
Ifigenia.
CÓMO VIO
LA REVISTA BOHEMIA LA ADQUISICIÓN DE LA COCO POR GUIDO GARCÍA
INCLÁN
La nota
publicada en la revista Bohemia en enero de 1948 dice :
“Respaldado por un grupo de industriales y comerciantes amigos, que
serán los principales anunciantes de la planta, Guido García Inclán, el
inquieto periodista, adquiere de otro compañero de profesión, Julio
César González Rebull, director del periódico El Crisol, la
emisora COCO.
”Guido
García Inclán dejó de pertenecer recientemente al noticiero de CMQ en
el que fungía como subdirector. Al abandonar esta empresa, no faltaron
otros que le hicieron magníficas ofertas, pero Guido no las aceptó
porque ya lo impulsaba una ambición: crear algo suyo. En los primeros
momentos trató de adquirir la CMW-Cadena Roja, mas su actual
propietario, Amado Trinidad no estaba interesado en la operación: Luego
encaminó sus pasos hacia Radio Progreso, pero tampoco pudo llegar a un
acuerdo con los dueños de esta emisora. Finalmente, su amigo Julio
César González Rebull lo animó a la adquisición de la COCO, en la
actualidad la tercera entre las difusoras más oídas del país, de
acuerdo con los efectivos surveys realizados por la Asociación de
Anunciantes de Cuba.
”Guido
García Inclán dará un carácter eminentemente periodístico a la nueva
COCO, creando El Periódico del Aire, una Institución de Periodística al
Servicio del Pueblo Cubano, del cual será director y subdirector el
destacado comentarista político José Pardo Llada.
“El
nuevo propietario de la COCO afirma que los noticieros radiales
pertenecen al pasado y aunará sus esfuerzos para hacer de su planta un
vibrante y moderno órgano periodístico del éter. Otra innovación que
llevará a cabo: eliminará las menciones comerciales en los cambios
de programas. Estima Guido García Inclán que el anuncio debe surgir como
el hit en la pelota”.14
El
escritor Oscar Luis López, al referirse a esta etapa de la COCO,
expresó: “La entrada de Guido García Inclán es como decir una
transfusión que se le hace a la COCO, y a partir de ese momento, como
caso interesante , nombre que ya tiene Guido por su prestigio, por su
trabajo , ya se empieza a decir que la COCO de Guido García Inclán. Al
extremo que en la actualidad he oído erróneamente plantear que Guido
García Inclán es el que pone en el aire la COC, es decir, que se debe a
Guido García Inclán, lo cual no es cierto, pero sí tenemos que apuntarle
que esta segunda etapa floreciente, de un impacto extraordinario,
dentro del proceso revolucionario , le cabe a él ser el propulsor de
toda esa trayectoria...En esa etapa Luis Casas Rodríguez seguía
siendo el ingeniero de la emisora”.15
Otro
testimonio, esta vez del locutor Evelio Sánchez Pérez, expresa: “El
Periódico del Aire, que se trasmite a partir de 1948, dirigido por
Guido García Inclán, su fundador, tuvo en aquella época una historia
enorme. Hay que decir que Guido arriesgó su negocio, por ser una
institución de periodistas al servicio del pueblo, en aquel entonces,
cuando la mayor parte del tiempo la emisora era suspendida por
decisiones de gobierno y entonces los anunciantes tenían temor de ir
allí a colocar sus productos.
”Cuando
Guido empieza hacer el Periódico del Aire salía un locutor, que decía,
metiendo la cabeza en un cubo, como si fuera un vendedor por la calle:
‘El Periódico del Aire, el Periódico del Aire’ y entonces salía el
locutor con voz solemne diciendo: el Periódico del Aire, una
Institución de Periodistas al Servicio del Pueblo Cubano, Director
Guido García Inclán. Cuando se iba a dar una noticia, Guido tenía una
sirena en el estudio , que daba por la calle Manrique y cuando había
noticias el periodista le hacía señas con la mano al operador para
que la pusiera y aquella sirena se oía en todas las calles
colindantes. Entonces se anunciaba Flash, El Periódico del Aire y se
daba una noticia de última hora en el momento que acababa de
producirse”.16
El
Periódico del Aire fue el primer noticiero que tuvo en Cuba una unidad
móvil para trasmitir desde cualquier lugar de La Habana, el
acontecimiento social o político en el instante en que sucedía. El
constructor de ese equipo fue el ingeniero Luis Casas Rodríguez y el
transporte utilizado era un pisicorre obsequiado por la firma
cigarrera Trinidad y Hermanos a cambio de que se dijera: “Transmitiendo
desde la unidad móvil Trinidad y Hermanos”.
Testimonio de Enrique Núñez Rodríguez
“Comencé
a trabajar en la COCO a partir de 1948; ya se encontraba Guido en ella ;
entonces trabajé en El Periódico del Aire en una sección humorística
de crítica política denominada Cuba en Llamas. Allí yo hacía libretos
y también trabajaban Manolo Ortega, Ramón Álvarez Viejo y un tal
Trujillo. Se encontraba también un evaluador de voces llamado Fito
Rico. Guido se apoyó mucho en esa sección que tenía una gran audiencia.
También recuerdo que en algunas oportunidades visitaba el estudio el
joven estudiante universitario Fidel Castro.
”Recuerdo que trabajé también con el poeta Rafael Enrique Marrero, autor
del espacio llamado Contigo en la Media Noche, que se trasmitía a las
12:00 en punto en vivo. Además fue un programa muy escuchado y algunos
oyentes llamaban para plantearnos temas románticos y entonces yo los
trasladaba al verso”.17
Guido
García Inclán y Eduardo R. Chibás. Vínculos inseparables
Las
relaciones de Guido con Eduardo R. Chibás, líder indiscutible del
Partido del Pueblo Cubano (Ortodoxos), se iniciaron a través de los
contactos personales entre ambos, animados por la misma identidad de
intereses políticos, que tenían una raíz común: el enfrentamiento a la
corrupción imperante y la denuncia sistemática a la desvergüenza, la
mentira y el atropello público.
Como
periodista, el director de El Periódico del Aire se comunicaba con el
insobornable líder de la ortodoxia, con el fin de emitir entrevistas y
artículos sobre la corriente que Chibás representaba, para amplias
capas de la población. Si bien al principio Guido no tomaba
participación en las actividades y mítines que efectuaba la ortodoxia,
sí hizo suya la misión de ser portavoz de la organización política,
pues recogía las palpitaciones e inquietudes que surgían dentro del
movimiento.
La
campaña popular contra las onerosas tarifas eléctricas sirvió de
pretexto para detener a Eduardo Chibás y condenarlo a seis meses de
privación de libertad. Contra esta arbitraria medida, tanto los
ortodoxos como otros importantes sectores populares, desataron una
oleada de protestas que, como era de esperarse, recibieron pleno
respaldo en las ondas radiales de la COCO, animadas por Guido García
Inclán,.
En tal
sentido, el Periódico del Aire trasmitió todos los actos en los que el
pueblo, solidarizándose con Chibás, pedía su excarcelación, al mismo
tiempo que denunciaba los atropellos de la anticubana Compañía de
Electricidad.
La
emisora COCO estuvo presente en el mitin que tuvo lugar el sábado 30
de abril de 1949 en el Parque Central, así como en un masivo acto que se
efectuó el 7 de mayo de ese mismo año entre las calles de Luisa Quijano
y Real, en Marianao, con el lema de “Chibás en la cárcel y los pillos
en la calle”. En esa ocasión, el también dirigente ortodoxo Juan Manuel
Márquez, criticó severamente al gobierno y arremetió contra los
monopolios extranjeros que explotaban a nuestro pueblo.
El
propio director de la COCO participaba de manera activa en estas
manifestaciones y haciendo gala de sus principios insobornables, unía
sus criterios junto a la causa común, y no abría solo las puertas de su
emisora para dar cabida a esa campaña popular, sino que exponía su
vida y su medio de subsistencia a favor de los más humildes.
También
el sábado 30 de abril de 1949, durante un gran acto público celebrado
en el Parque de la Libertad, en Matanzas, el director de El Periódico
del Aire, patentizó su repulsa al odiado pulpo eléctrico, mediante
vibrantes palabras muy aplaudidas por los que se encontraban allí
presentes y horas más tarde ese sentir era expresado en enaltecedor
editorial trasmitido por la emisora COCO contra la injusta sanción
impuesta a Chibás. También se efectuó un acto en el parque de Bauta,
convocado por el Partido del Pueblo Cubano (Ortodoxos),el que fue
reprimido violentamente por la Guardia Rural.
Como
era de esperarse, el gobierno de turno, encabezado entonces por Carlos
Prío Socarrás, movió sus resortes con el fin de amordazar la libre
expresión de un pueblo en lucha y procedió a la clausura de la COCO, en
el mes de mayo de 1949.
Ante tal
acontecimiento, Eduardo Chibás, desde la celda en la que se encontraba
injustamente encarcelado, dirigió una airada protesta en carta enviada
a Guido el 6 de mayo del propio año, La cual decía:
“Querido
Guido:
”Acabo
de enterarme que le han clausurado su noticiero de la COCO durante
tres días por decir la verdad. Es infame.”
”Desde
mi celda de la cárcel, donde me encuentro preso por gritar la verdad, le
escribo estas líneas de protesta indignada y de solidaridad fraternal.
“Cada
día el Gobierno respeta menos la libertad de palabra. Si los hombres
libres de Cuba no se unen inmediatamente para defender con valentía la
libertad del pensamiento, pronto caeremos en la tiranía”.18
Para
clausurar la emisora COCO, el ministro de Comunicaciones, Carlos
Maristany se amparó en razones que según alegó eran de carácter legal.
Pero lo cierto fue que se trató de una franca e ilegítima agresión a
la libertad de pensamiento dado que el pretexto directo utilizado para
cerrar la planta fue la transmisión de una entrevista que hiciera el
periodista Néstor Piñange al connotado gangster Orlando León
Lemus, conocido por El Colorado, en aquellos momentos perseguido por la
Policía y reclamado por los Tribunales de Justicia.
Según
los inspectores, la emisora COCO no había podido justificar la
procedencia de la referida entrevista. La causa principal era otra:
silenciar aquella trinchera insobornable que reclamaba justicia.
TESTIMONIO DE PASTORITA NÚÑEZ
“…La
Jornada Martiana de la COCO era como un seminario que se ofrecía a
todo el pueblo. Por ella me vinculé estrechamente a la emisora, que era
capaz de difundir la obra y el pensamiento antiimperialista de José
Martí, y por supuesto a su gran exponente: al periodista que daba a
conocer en sus charlas radiales las múltiples facetas y la
interpretación contemporánea de la doctrina martiana.
”Guido
también fue una voz permanente de denuncia contra todo lo mal hecho,
no solo durante el batistato, sino en la etapa de los gobernantes, que
electos por el pueblo, traicionaron todos los principios. Todas mis
declaraciones de denuncias sobre la corrupción gubernamental fueron
acogidas por él y lanzadas al aire por la COCO. Juntos pusimos en la
picota pública a los ministros venales, y junto a Eduardo Chibás hizo de
su Periódico del Aire una trinchera de vergüenza.
“Guido
me escondió en su despacho de la COCO propaganda subversiva. Hizo más,
con todo el riesgo que suponía en aquellos momentos dio a la publicidad,
leyéndola completa, mi proposición al Consejo Director Nacional del
Partido del Pueblo Cubano, de nombrar al doctor Fidel Castro Ruz, que
estaba combatiendo en la Sierra Maestra, como Presidente en Armas del
Partido
Ortodoxo, en sustitución del doctor Pelayo Cuervo Navarro, vilmente
asesinado el 13 de marzo de 1957.
Y algo
más sobre Guido agregaba la combatiente revolucionaria Pastorita Núñez:
”…Después del triunfo de la Revolución, desde los micrófonos de la COCO,
su voz se alzó más fuerte que nunca para denunciar a la
contrarrevolución; la vergonzosa entrega de los anexionistas y al
imperialismo agresor.
”Puedo
decir sin temor a equivocarme, concluye Pastorita, que Guido García
Inclán fue un artífice de la palabra radial, un arquitecto de cubano
patriota, revolucionario y martiano”.19
A
finales del año 1948, en ocasión de celebrarse un acto en la Universidad
de La Habana contra el aumento del pasaje, el gobierno de Carlos Prio
trató de impedir su salida al aire y como todo estaba previsto desde el
día anterior, pues se había trasladado la unidad móvil de la COCO, por
orientación de Guido para la Universidad, se trató de hacer por la
línea telefónica, lo cual resultó imposible, entonces el Ingeniero Luis
Casas Rodríguez pudo trasmitir el acto por la microonda desde el
equipo instalado en el pisicorre, el cual había sido colocado detrás
del aula magna.
La
emisora mantenía receptores de radio en la policía, y seguía paso a
paso el movimiento de este cuerpo y estaba al tanto de todo lo que
ocurría en ese orden para poder saber los casos que se iban
produciendo y en cuanto a lo internacional se solicitaban los servicios
del periódico El Crisol que se encontraba en los altos de la
emisora .
El
propio Guido García Inclán, al ser entrevistado el 27 de marzo de 1979
por Guillermo Alonso expresaba: “Nosotros tenemos un lema que lo dice
todo: ‘Un diario sin papel y sin distancia’, que no es nuestro, que no
es mío, que es de Lenin, que a Lenin cuando le dijeron, mira, por la
radio se puede llegar con la palabra de uno a todos los rincones, dijo,
qué bueno, un diario sin papel y sin distancia, que es el lema nuestro,
es de Lenin, y yo creo que eso lo resume todo.” Prosigue diciendo en
esta ocasión Guido: “Todo lo que sea una vía de comunicación con el
pueblo es responder al pueblo, porque yo creo que mientras el pueblo
tenga confianza en ti tú puedes hacer esa labor, en que por lo tanto
siempre ha sido mi misión, siempre a lo largo de mi vida, defender al
pueblo, porque el pueblo tiene cariño por nosotros...
“Cuando
adquirí la COCO —dice Guido en esa entrevista— yo no tenía apenas
dinero, porque tener unos cinco o diez mil pesos no era tener dinero y
tenía que hacer una entrega de 30 ó 50 mil pesos. Entonces fui a ver a
mis anunciantes, que más que anunciantes eran amigos míos y les dije:
mira chico, tengo este problema, pero tú quieres hacerlo, y entonces me
dan contrato por uno o dos años y me entregan equis miles de pesos y yo
le hago la propaganda, luego con ese efectivo reuní algún dinero...
luego vinieron los problemas porque casi siempre está clausurado y los
anunciantes me decían, pero si tú nunca estás en el aire, qué anuncios
tú vas a dar... Me pasaba la vida clausurado, después cuando salía,
tenía que hacerlo en una fortaleza mayor, enfrentándome otra vez al
gobierno...Tenía que recaudar lo suficiente para pagar la mensualidad,
los pagarés se me vencían y tenía que estar en la calle en contacto con
todo el mundo, todos los días, no quería coger dinero del gobierno,
absolutamente, porque yo le escribía una carta mensual a cada
ministerio diciéndole, dígame si este ministerio ha dado un solo
centavo a nuestra emisora en el mes...todas esas cartas las
conservo...Recuerdo que el mismo Tabernilla me escribió en una ocasión
una nota de su puño y letra: ‘...pero acaba de darte cuenta que tú
defiendes a los tuyos pero deja que yo defienda a los míos...’ me decía
Tabernilla porque yo atacaba al ejército en ocasiones”.20
Volviendo a la época de los inicios del Periódico del Aire, precisamente
el 7 de febrero de 1948, el recio revolucionario de Marianao, que
posteriormente fuera Segundo Jefe de la expedición del Granma,
Juan Manuel Márquez inauguró la Hora de la Ortodoxia Revolucionaria. En
esta etapa la emisora se encontraba en San Miguel, entre San Nicolás y
Manrique y Fernando Inclán Lavastida fungía como subdirector del
programa y Juan Manuel era el Director. El programa se trasmitía todos
los domingos entre 7:00 y 7:30 de la noche. Es por ese mismo espacio
que Fidel Castro denunció las compras que hacía Prío de fincas en
Pinar del Río, apareciendo como comprador un tal Gerardo Pérez, hermano
de Virgilio Pérez, quien era Representante y Ministro del gobierno
Auténtico. Desde los micrófonos de la COCO Fidel daba a conocer el
nombre de las fincas, el lugar de ubicación, la cantidad de dinero por
la que se había adquirido y explicaba que esas compras se hacían con el
dinero robado al pueblo.
Otra
constancia documental de la labor desplegada por Guido tan pronto
asumió la emisora fue su nota reiterada en la revista Bohemia,
en mayo de 1949, referida a su protesta radiada durante los espacios
del Periódico del Aire en relación con el incremento de las tarifas
eléctricas, en la que se observaba la desconfianza y agudeza política
del director de la emisora en relación con la actitud asumida por el
gobierno de entonces. Dice la nota:
“Debemos
sentirnos satisfechos pero no debemos descansar en el triunfo
‘aparentemente’. El señor Presidente de la República ha declarado
oficialmente, desde el Palacio Presidencial, que rebajará las tarifas
eléctricas pero debemos aguardar el acontecimiento, pues hasta el
momento sólo hay promesas de libertad, y promesas de libertad de prensa
hablada o escrita hizo también el joven presidente cuando escaló el
poder, permitiendo ahora que nuestro Periódico del Aire de la COCO fuera
clausurado durante tres días consecutivos, de manera injusta e
improcedente.
”Debemos
mantenernos en la trinchera defensiva de la ciudadanía, haciendo un poco
de luz, pero con vela en alto”.21
Muchas
fueron las cartas hechas o enviadas a los diferentes órganos de prensa
en relación con las constantes clausuras de que fue víctima la
emisora COCO durante el gobierno Auténtico. Resaltan entre ellas las
del columnista Enrique Pizzi de Porras, del periódico El Crisol
Quien dijo: “No solamente ha constituido una agresión a la libertad de
pensamiento la clausura de la COCO, el asalto a la redacción de
Tiempo en Cuba y la suspensión de la hora radial del presidente de
la Ortodoxias el ex senador Chibás, sino ni siquiera justifica esos
hechos un supuesto propósito de ejemplaridad”; la enviada a Bohemia
por el líder obrero Lázaro Peña, quien catalogó la suspensión del
Periódico del Aire como una reimplantación del odioso Servicio de
Inteligencia Militar como ejemplo de que el gobierno iba por los
caminos de resucitar el palmacristi y la violación de los domicilios.
Manuel
Bisbé, líder parlamentario de la ortodoxia, levantó su voz para
condenar el arbitrario silenciamiento de la popular emisora al
expresar:
“...Guido García Inclán es un periodista cubano y honesto y, por tanto,
resulta injustificable la clausura del Periódico del Aire que él
dirige... —y agrega. En vez de detener al Colorado, lo que hace el
gobierno es clausurar la COCO, que está dirigida por un periodista
insobornable, que no es un perturbador, como dijo el señor Maristany en
el último Consejo de Ministros, sino un político honrado”.22
Siguiendo el camino de la mordaza a la libertad de prensa entronizado
por el gobierno auténtico, el 1ro de mayo de 1948 es clausurada la
estación Mil Diez, la emisora del pueblo como se le conocía, que desde
el primero de abril de 1943 trasmitía al servicio de los más
genuinos intereses de los trabajadores y las capas más humildes de la
población. Ante el cierre de la Mil Diez, Guido le dio entrada a todos
aquellos que habiendo trabajado en esa emisora eran lanzados a la
calle sin posibilidad alguna de conseguir empleo en otras emisoras.
Fueron los casos de Ibrahim Urbino, Manolo Ortega, Oscar Luis López y
otros. Y revolucionarios del Partido Socialista Popular que tenían
espacios en la Mil Diez como Salvador García Agüero, Lázaro Peña, Juan
Marinello y otros, quienes encontraron en el Periódico del Aire la
oportunidad para continuar defendiendo la causa de los explotados.
He aquí
el testimonio de Guido al respecto:
“...Cuando clausuraron la Mil Diez, yo estaba abierto, y entonces yo les
dije a esos compañeros, que no tenían que apresurarse por nada, que
entraran en la COCO, como si fuera la Mil Diez, como si fuera la casa de
ellos, y que allí podían tener los mismos espacios que poseían en la
Mil Diez, y hablar cuanto quisieran, y efectivamente, Juan Marinello,
que era entrañable, el mismo Lázaro Peña, Manolo Ortega, que se
encontraba también en la Mil Diez, vinieron con nosotros...”23
“LA HORA
DE LA ORTODOXIA”, MÁS TARDE “VERGÜENZA CONTRA DINERO”
El 7 de
febrero de 1948 se inauguró en las emisoras COCO-CMCK La Hora de la
Ortodoxia Revolucionaria, que se transmitía cada domingo entre 7:00 y
7:30 de la noche, siendo su principal protagonista el incansable
gladiador político, el revolucionario marianense Juan Manuel Márquez,
aunque no fue solamente él quien incursionó este aguerrido espacio en
el que también otros revolucionarios denunciaron las arbitrarias
medidas del gobierno, la corrupción imperante, el acoso a las libertades
públicas y se rechazó el injerencismo y la demagogia.
En
acatamiento a órdenes que partieron del propio Palacio Presidencial,
en más de una ocasión el Ministerio de Comunicaciones suspendió la
Hora de la Ortodoxia, y fue el 31 de enero de 1949 cuando se dictó la
clausura definitiva del espacio. Contra tal arbitrariedad la Asamblea
Municipal Ortodoxa en Marianao hizo la siguiente declaración: “La
Asamblea Municipal del Partido del Pueblo Cubano formula su más enérgica
protesta contra la Resolución que dictada el pasado lunes 31 suspende
La Hora de la Ortodoxia, que dirigía el presidente de este organismo,
Juan Manuel Márquez, y la que se trasmite los domingos a las siete y
media de la noche por la emisora COCO.
”La
absurda medida entraña una manifiesta violación del precepto
constitucional que garantiza la libre emisión del pensamiento. Este
ataque a La Hora de la Ortodoxia constituye un episodio más en la trama
urdida por el gobierno a fin de atemorizar a cuantas voces se levantan
en Cuba denunciando los negocios turbios, el pistolerismo oficial y la
coacción al libre ejercicio de los derechos democráticos”.24
Al
respecto damos a conocer el testimonio de Pío Luis Machado Martínez,
colaborador entonces de Juan Manuel Márquez, quien nos dice: “Cuando
clausuraron el Programa La Hora de la Ortodoxia Revolucionaria, Juan
Manuel Márquez me invitó a ir a ver a Guido y fuimos en el auto de
Manuel Bisbé, con Fernando Inclán Lavastida, Luis Orlando Rodríguez y
nos reunimos en la oficina de Guido, en su emisora COCO. Al comenzar el
contacto Guido nos dijo que ya ese programa no podía salir porque
había sido clausurado, pero le propuso a Juan Manuel otro con
frecuencia diaria y este le responde que el mismo debe llamarse
Vergüenza Contra Dinero y Guido lo aceptó entusiasmado”.25
El
nuevo espacio Vergüenza Contra Dinero, que era el lema de la ortodoxia,
tenía la ventaja de que se transmitía diariamente, en el horario de
5:45 a 6:45 de la tarde, excepto los domingos. En él intervinieron
también, de forma ocasional, Eduardo R. Chibás, Fidel Castro, Luis
Orlando Rodríguez, Manuel Bisbé y otros miembros del Partido del Pueblo
Cubano (Ortodoxo).
Por su
extraordinario valor histórico y contenido político recogemos tres
trabajos transmitido por Juan Manuel Márquez en su hora radial
Vergüenza contra Dinero, de la COCO; uno de ellos, Carta abierta a Guido
García Inclán, del 17 de junio de 1951, en el que explica las
vicisitudes de Guido García Inclán para que se hiciera de una vez la
tumba digna de José Martí; el otro, titulado Rebuzno del Asno,
dirigida al entonces Ministro de Educación Aureliano Sánchez Arango, en
ocasión en la que este ofendiera al líder de la ortodoxia Eduardo R.
Chibás, quien se encontraba gravemente herido como consecuencia del
disparo fatal en la disputa con el propio titular, corrompido hasta la
médula. No quiere decir que sean estos los únicos trabajos que
resultaría meritorio publicar, porque lamentablemente hay otros muchos
que no pudieron conservarse por diversas razones.
Carta
abierta a Guido García Inclán 26
“Todo el
dolor que conlleva la vida limpia y pura, todos los obstáculos que los
hipócritas y los malvados ponen en el camino de los que tienen algo
serio que realizar sobre la tierra, toda la deslealtad junta del mundo,
todos los infortunios agrupados, son en cierto días, rémoras demasiado
débiles para impedir el júbilo de un corazón honrado. Así hoy, es para
mí uno de esos días.”
”El
tierno beso de mi hija y los ojos que aún brillan y fulguran de mi
padre es dicha demasiado alta que no podrán turbármela este día los
enanos de la vida, por mucho que se empinen. Pero cómo pagaré yo a
ellos la dicha desbordante con que inundan mi alma. Cuál es el premio
verdadero al fulgor renovado en este día en los ojos de mi padre. De
qué manera pagaré yo a mi hija el mundo de placer que dejó en mí,
cuando como un ángel posó sobre mi frente la ingenua ternura de un beso.
”La
limpieza en la vida es el único tributo con el cual pueden compensarse
los desvelos de aquellos que nos aman limpiamente. Pensé entonces en
honrar a alguien que honrase la vida, como la única manera de
corresponder con altura al amor de esos dos pedazos de mi mismo. Y
pensé en ti, hermano. Tú acabas de prestar un singular servicio a
nuestra tierra.
Porque
quien honra sirve. Pensé en la noble y abnegada preocupación de tu
existencia en los últimos diez años. Una preocupación obsesionante, que
hacía temer a tus amigos por el equilibrio de tu propia razón. Era en
verdad tu grito una mezcla de indignación y de ferviente anhelo, de
prédica religiosa y de yo no sé qué sabor de cosa no terrena, como si
fuese dicha desde un púlpito situado en los más alto de un picacho
andino, o sobre un estribo inquieto de la gloria. Pero era frecuente
oír a un hombre que gritaba desesperado: ‘Hace falta una tumba digna
para José Martí’.
”Sí,
hacía falta una tumba digna para José Martí, allá en el cementerio
que se desmoronaba de Santa Ifigenia, olvidada como su prédica y su
conducta, se deterioraba la tumba que guardaba la osamenta sagrada del
mejor de los cubanos. Pero ya tiene tumba de sus huesos el pálido
Cristo americano. Y la tiene por ti, hermano, y nada más que por ti.
Bien sé que un poeta colaboró contigo, y era natural, porque solo un
poeta podía entender su grito. Menos afortunado que tú, no pudo ver la
obra donde puso su piedra, pero tú recuerdas con cariño al poeta
Fileno de Cárdenas y la patria lo recuerda agradecida. Aunque en esto
de la muerte, como diría el propio Martí en la velada en honor al poeta
Torroella, si la patria quiere no está muerto. Pero fue tu grito, tu
grito perenne y desesperado de hijo legítimo de América, quien buscó
para el gran americano la tumba adecuada a su grandeza. Parecías un
niño febril y atormentado buscando tumba para un padre pobre, pero a
veces parecías también un león enfurecido que quería ocultar el pico de
los buitres el cadáver de tu cachorro más querido.
”Ya
lograste uno de los empeños que más puede ennoblecer a un corazón
cubano. Ya tu Martí, porque él te pertenece a ti más que a ningún otro
cubano, porque tú hiciste por él lo que ningún otro cubano hizo, tiene
su tumba hermosa y perdurable. Aplaudir la victoria, la victoria que
ganaste en singular combate en defensa y consagración de un hombre
justo, es todo lo que puede este pobre corazón cubano. Muchos tristes y
enfermos en la patria conocen el bálsamo bueno de tu corazón, pero si
tú no hubieses prestado a la república tantos y tan buenos servicios,
este último, este solo, de buscarle la tumba digna a José Martí,
bastaría para consagrarte como a un cubano indiscutible e indiscutido.
¿No has sentido en estos días como te tocaban en la frente las alas de
la gloria? Pues yo sí, yo he visto a una paloma personera del cielo
que revoloteaba sobre tu cabeza y te traía en el pico un mensaje de
Dios.
”Al fin
ha ocurrido algo que aligere a la vida del fardo de preocupaciones que
acumulan en la mente de todo cubano de médula y raíz ante los destinos
cada vez más inciertos de la patria. Ese empeño tuyo que ha triunfado,
es hoy nuestra única alegría, pero en verdad no necesitamos otra, ella
nos basta. Gladiador, puedes ya guardar la espada y desposarte con la
gloria. Hermano, nada tengo, nada soy, pero amo a tu Martí, como si
fuese mío, en nombre de dos amores inmutables, en nombre del viejo y de
mi hija, te doy las gracias por haber reivindicado para siempre la
memoria sagrada del Maestro”.
Firmado:
Juan Manuel Márquez 27
Rebuzno
del asno
El
domingo 12 de agosto, a las seis y cuarto de la tarde por la CMQ,
Aureliano Sánchez Arango, a través del espacio que ocupa y con el título
“En defensa del autenticismo”, lanzó una nueva andanada de patadas
sobre Eduardo R. Chibás.
“Yo voy
a contestarle esta tarde adecuadamente a Aureliano Sánchez Arango, pero
antes he de formularles a todos los auténticos unas cuantas preguntas,
para destruir de entrada la tesis que Aureliano trata de impregnar en
las masas auténticas. Y no es otra que ‘La defensa del autenticismo’.
Siempre que este aventurero habla, pone por título a sus rebuznos ‘En
defensa del autenticismo’. Claro que este título invariable , se lo pone
el asno a sus trabajos como una táctica nazista, pues sabido es que
Adolfo Hitler,decía siempre que una mentira repetida incesantemente
adquiría la fuerza de una verdad. Y por eso Aureliano repite
incesantemente esa frase de ‘En defensa el autenticismo’, para ver si
logra que las masas auténticas crean de verdad que él es un abanderado
del autenticismo.
”Pero yo
quiero hacerles una pregunta a los auténticos, a los que fueron mis
compañeros de lucha, a los que juntos fuimos perseguidos, a los que
juntos pasamos calamidades y miserias, a los que juntos soñamos con una
Cuba dignificada por la conducta de los gobernantes y la virtud de los
gobernados; a los que vieron cómo la tuberculosis minaba la vida de
muchos compañeros que preferían morir antes de renunciar a defender los
ideales de libertad y de justicia social que anhelaba nuestro pueblo; a
los que juntos dimos nuestros centavos y nuestros reales para sostener
el Partido Revolucionario Cubano, a los que muchas veces pasaron por el
dolor de no poderlos dar; a los que juntos compartimos las angustias y
el pan; a los que juntos anduvimos de pueblo en pueblo, de tribuna en
tribuna, a los que juntos vimos morir a los compañeros asesinados por la
tiranía, a los que juntos luchamos contra todos los peligros en la
huelga de marzo, donde Pedraza y Batista asesinaron en una semana a más
de 500 cubanos en toda la isla; a los que juntos saboreamos durante años
el rancho inmundo del presidio y conocimos la insolencia de los
capataces y la crueldad de las brigadas, a los que juntos lloramos de
alegría el primero de junio, cuando el pueblo barrió en las urnas al
régimen castrense del déspota implacable, que negó todas las libertades
y se bañó en la sangre generosa del pueblo.
”Yo
pregunto, con la autoridad que dan los viejos recuerdos, entrañablemente
clavados en el alma: yo pregunto a esos compañeros, en su mayoría
cesantes y hambrientos hoy como ayer, porque los bombines, los
desfachatados y los cara dura se han apoderado del Partido
Revolucionario Cubano y de las mejores posiciones del gobierno: yo
pregunto a estos compañeros que miran para la vieja casona del
autenticismo y no la reconocen por ninguna parte; yo pregunto a los
compañeros y amigos de tantos años de vigilia que se sienten en el
Partido Revolucionario Cubano como quien está en casa ajena, porque
cuando mejor los tratan, los consideran como los parientes pobres; yo
pregunto a mis compañeras y compañeros de aquellos días gloriosos,
porque los dignificaba el ideal y el sacrificio desinteresado y
constante; yo les pregunto, sin interesarme cómo piensan hoy, en que
época, en qué momento, le vieron la cara a ese granuja que responde al
jocoso nombre de Aureliano Sánchez Arango.
”Y este
aventurero, este aprovechado, este filósofo de pacotilla, presuntuoso y
pedante, engreído y fatuo como un pavo real, el que engola el rebuzno y
tiene el descaro de decir que es una voz en defensa del autenticismo.
”Es este
Aureliano, el que imitando al puerco de Antonio Varona, insultó de la
manera más vil a Eduardo R. Chibás, que agoniza en una cama del Centro
Médico Quirúrgico este asno, el que sostiene canallescamente que Chibás
se dio un tiro de tipo teatral para ganar fama y popularidad política.
”Es este
asno, el que dice que el tiro que Chibás se dio en el vientre, era un
tiro que ya se sabía el resultado que habría de tener.
”Es este
asno, el que después que le han probado hasta la saciedad sus
depredaciones y sus robos en el Ministerio de Educación, sigue
cínicamente diciendo que emplaza al Partido del Pueblo Cubano, para que
le pruebe lo que Chibás no le pudo probar. Es este asno, el que no
respeta ni la agonía de su adversario político, y quiere seguir medrando
dentro del gobierno y del autenticismo como un paladín de la causa
oficial.
”Es este
asno, confidente de Batista y de Pedraza, quien quiere sostener ante el
país, que él es un símbolo de la limpieza y de la honestidad, después
que toda la nación sabe que él es uno de los ladrones más desfachatados
que han regenteado el Ministerio de Educación.
”Es este
asno, el que dice que no se pudo probar lo de Guatemala, y que el
Partido Ortodoxo ha tenido que callarse por no disponer de pruebas para
respaldar a Chibás. Pues yo soy u miembro de la Asamblea Nacional del
Partido del Pueblo Cubano, y digo que sí, que Chibás tenía toda la
razón, y además lo digo yo personalmente. Yo, Juan Manuel Márquez, digo
que sí, que usted es un ladrón, y que tiene no sólo repartos en
Guatemala, sino que los tiene en todas las capitales de la América
Latina.
”Usted
amenaza con enviar a los Tribunales de Urgencia, a todos los que no
sean legisladores y gocen de inmunidad parlamentaria. Por mi parte puede
hacer lo que más le acomode, puede perseguirme, puede enviarme a los
Tribunales de Urgencia. Usted es un fanfarrón y un miserable que no
sabe nada más que eso: amenazar cobardemente con la cárcel a los que no
puede impresionar con sus desplantes de guapetón trasnochado.”
“Si todo
esto llegase a molestarle, si le quedase un átomo de dignidad y quisiera
pedirme cuenta de estas palabras que le estoy diciendo para que las
escuche toda la nación. Porque quien se expresa como usted y como usted
ha roto todos los límites de la consideración y del respeto a un hombre
que se está debatiendo entre la vida y la muerte, no puede pedir
límites a nadie; usted ha desbordado todos lo límites y Cuba sabe bien
que todo cuanto se le diga está bien dicho porque usted no ha respetado,
ni el lenguaje ni su alta investidura, ni la agonía de un hombre. Pues
bien: si quiere pedirme cuenta de todo cuanto le digo esta tarde puede
hacerlo, pero eso sí, no recurra a los métodos afeminados del duelo,
esos duelos en que nunca corre la sangre y que siempre se reconcilian
los contendientes. Si quiere pedirme cuentas como hombre, échese la
pistola a la cintura y salga a buscarme, sin algarabía, sin escándalos,
sin la teatralería que tanto le agrada.
”Chibás
no puede contestar a sus injurias, porque su salud no se lo permite,
pero yo soy su compañero y amigo, y sin que nadie me lo pida, ni nadie
me lo sugiera, saco la cara por él, en el lugar que le plazca, el día
que usted quiera, y con una pistola en la muñeca cada uno. Esa es mi
respuesta a sus palabras del domingo. Fanfarrón y cobarde, aventurero y
ladrón.
”Rebuzne, rebuzne, siga rebuznando. Algún día el carro victorioso de la
ortodoxia lo encontrará en el camino y lo enganchará entre sus barras
para que saque de paseo a Chibás y pueda saciar sus ansias de payaso y
sus afanes exhibicionistas. Culpa no será nuestra, culpa de que algún
día esté tirando de un carro por las calles, será suya y únicamente
suya, usted que rebuznó el domingo y todos les hemos tomado por UN
ASNO”.28
Carta
circular a los oyentes de la COCO
“Cuando
hace algún tiempo, un vocero interesado, al servicio de Fulgencio
Batista, me atacó con los peores denuestos y afirmó que la hora de
Vergüenza contra Dinero no la oía nadie, yo sólo solicité de las
mujeres y los hombres de mi Patria que me hacían el honor de
escucharme, el favor de que me enviasen unas líneas para que me ayudasen
a desentir al atrevido panegirista de la fiera que se agazapa en la
madriguera de Kukine. Entonces recibí una grata impresión pues en una
semana llegaron a mi mesa de trabajo de la COCO, quince mil cartas,
algunas de las cuales recogían hasta cien firmas.
”Aquella
demostración de simpatía me alegró como a un niño, porque a través de
aquellas cartas veía el alma buena y brava de mis compatriotas, y,
además, porque comprendía que no era inútil la palabra cuando ella se
ponía al servicio de los grandes ideales de un pueblo.
”Pensé
en escribir una carta personal a todos los que me reportaron la hora,
pero no era posible contestar personalmente quince mil cartas y
entonces decidí hacer una carta igual para todos, agradeciendo el
apoyo y la solidaridad que todos me brindaron, cuando un compatriota
bueno, pero extraviado, me atacó injustamente porque defendía el
derecho de mi pueblo que es también su derecho.
”Ni que
decir tengo, que no guardo rencores contra él. Eso será digno de un
hombre que nació en la misma patria de José Martí. Pero siento por
ustedes, cuyas cartas fueron como un rosario de esperanzas y de
alientos para las nuevas y triunfales jornadas de la Patria, el cariño
agradecido y tierno de un hermano”.
”Los
quiere y admira su obligado servidor”.29
Juan
Manuel Márquez
La COCO
informa al pueblo los detalles de los más importantes acontecimientos
Apenas
cuatro meses después de fundarse por Guido García Inclán El Periódico
del Aire, se produjeron las elecciones generales del 1ro de junio de
1948. En este acontecimiento se destacó el trabajo informativo
desplegado por el colectivo dirigido por Guido para mantener
constantemente informado al pueblo acerca de cada detalle de este
proceso. Un día antes de las elecciones, el candidato a la presidencia
por el Partido del Pueblo Cubano (Ortodoxos), Eduardo R. Chibás se
dirigió al pueblo a través de los micrófonos de la COCO.
También
daba a conocer Bohemia en aquella ocasión que: “la COCO había
puesto a funcionar un auto equipado con una planta transmisora de onda
ultracorta, que enviaba sus mensajes desde cualquier parte a la emisora
principal y eran retransmitidos por ésta…” Agregaba Bohemia:
“...por esta emisora hablaron los cuatro candidatos presidenciales y
por ella se dirigió también a la ciudadanía un alcalde, tal vez el más
modesto de todos sus congéneres, Julio Santamaría Valero, Alcalde de
Las Yaguas...” El ingeniero de la planta era Luis Casas Rodríguez y
siguiendo el hilo de la revista Bohemia, esta destacaba en un
trabajo publicado el 22 de agosto de 1948, que entre los programas o
audiciones políticas más escuchados se encontraban las charlas de
García Agüero por la COCO.
Dos años
más tarde, en las elecciones parciales del 1ro de junio de 1950, la
revista Bohemia publicó que el Periódico del Aire se había
mantenido en contacto con el público desde las seis de la mañana del
día primero hasta las seis de la mañana del día siguiente, y destacó
que durante 24 horas continuas, Guido García Inclán y su equipo de
reporteros, técnicos y locutores no tuvieron un minuto de descanso para
responder a las llamadas que se hacían desde las juntas electorales
municipales, las oficinas de los candidatos, el Tribunal Superior
Electoral, las casas de socorro, los hospitales y los colegios
electorales. Acotaba Bohemia, que se daba el caso de que
populares animadores deportivos como Cuco Conde, Felo Ramírez* y Jorge
Delgado, que se habían pasado el año hablando de pelota, el día de las
elecciones no hicieron otra cosa que hablar de política.
Labor
humanitaria desplegada por Guido García Inclán
Guido
desplegó también en la radio, la labor que venía haciendo, desde hacía
años, a través de las páginas de la revista Bohemia, a favor de
las personas desvalidas, enfermos y necesitados económicamente, asimismo
se realizaron verdaderas jornadas o campañas de ayuda en hospitales.
Ejemplo de ello fue la del sanatorio antituberculoso de La Esperanza,
ubicado al sur de la capital (hoy Julio Trigo) instalación que se
convirtió por aquella época para los enfermos que allí llegaban, en todo
lo contrario del nombre que le habían puesto. En esa ocasión se
denunciaron por la emisora y su Periódico del Aire el maltrato de que
eran víctimas esos enfermos en aquel hospital, mientras se
enriquecían otros individuos con el robo de una gran parte de los
pocos recursos que para allí se destinaban.
El
destacado periodista hacía llamamientos a la ciudadanía por radio,
para que la gente acudiera a ese hospital con alimentos, y la población
respondía con lo que pudieran. También decidieron trasladar a los
enfermos, en un ómnibus desde el sanatorio La Esperanza hasta el estadio
universitario, y allí les dieron comida.
Testimonio de Guido García Inclán sobre el asesinato de Justo Fuentes
Clavel
“Cuando
aquello la COCO trasmitía en Virtudes y Manrique. Allí iban todos los
días los muchachos de la FEU a hablar, y ese día, como casi todas las
semanas, fue a la emisora Justo Fuentes Clavel. En la ocasión iba con
un grupo de dos o tres personas más y cuando bajó la escalera por la
calle Virtudes lo estaban esperando.
”...el
micrófono estaba pegado a la ventana y yo cogí el micrófono, lo arranqué
y dije: a las estaciones de policía, en estos momentos están tiroteando
a Justo Fuentes, se está arrastrando debajo de la máquina nuestra que
está parada aquí...se agarra a esto...le están disparando. Se lo
decíamos a la Décima Estación de Policía porque sabíamos que la COCO
estaba puesta en todas las estaciones de Policía. Así supo la población
de aquel vil asesinato”.30
La
línea editorial del Periódico del Aire
Desde
el comienzo del Periódico del Aire, el propio 28 de enero de 1948, Guido
identificó los espacios informativos de la emisora con los sectores del
pueblo que en mayor medida sufrían los embates del capitalinos, y ello
condujo a que estos espacios se hicieran de una vastísima audiencia en
una población que ha sabido hacer derroches de heroísmo, pero que
también comienza a sentir la frustración de la guerra de
independencia, escamoteada por el imperialismo, y también de una
revolución que en la década de los años 30 se había desmoronado como
consecuencia de la entrega vergonzosa de nuestra identidad nacional a
los intereses foráneos.
Junto a
las campañas de carácter humano, Guido García Inclán lanzó sus cargas
de verdades contra los desmanes de los gobiernos de turno, y sus
editoriales sirvieron de vehículo para denunciar los males vigentes
entonces y para defender la dignidad nacional ultrajada.
El
editorial resultó el principal medio empleado por Guido para la
expresión de las opiniones y posiciones en relación con un
acontecimiento determinado, y devino, esgrimido por él desde la COCO, en
una poderosa arma de lucha contra los enemigos del pueblo y como
eficaz medio para expresar los puntos de vista de la emisora a través
de la polémica con sus adversarios. Sobre este aspecto el propio Guido
decía que su línea editorial tenía que ser dura en ocasiones porque
era preciso levantar el espíritu de la ciudadanía, y aunque
personalmente perjudicaba a algunos, para él estaba por delante los
intereses de la Patria.
A través
de esos editoriales Guido comenzó a expresar abiertamente su apoyo a
la causa de la juventud ortodoxa, fundamentalmente reflejada a través
de las campañas diarias que perseguían el adecentamiento de la
República y que tenían como soporte básico la continua cruzada de
Eduardo R. Chibás contra la demagogia y la corrupción, que venía
agrupando a una gran mayoría del pueblo, fundamentalmente a jóvenes,
con una conciencia todavía imprecisa pero con la percepción de que
resultaban necesarios cambios sustanciales, económicos, políticos y
sociales, que dieran un vuelco a la situación que padecía el país.
El
Periódico del Aire era propiedad de Guido García Inclán y él
personalmente lo dirigía e iba insertando todas las informaciones
que les entregaban de acuerdo a su criterio. Esta peculiaridad del
Periódico del Aire hacía que no tuviera hora fija de cierre, y
aunque se estuviera radiando el mejor programa, se interrumpía para
ofrecer los pormenores de los acontecimientos más importantes. Al
respecto, el director de la COCO decía:
“Nuestro empeño es hacer de toda la planta un gran periódico
escrito, (claro está) , sobre música grabada o en vivo, pero
siempre dispuestos a truncarla si es necesario para dar paso a la
noticia. No tenemos duración fija para dar la noticia”.31
En otro
aparte Guido agregaba: “Cada día tratamos de hacer una trasmisión
humana, diariamente recibimos alrededor de 80 a 100 cartas, la
mayoría de ellas son peticiones, enfermos que quieren ingresar en los
sanatorios o necesitan estreptomicina, penicilinas, carros de ruedas,
muletas... Aprovechamos el transporte para llevar a los hogares
cubanos el dolor de esos caudros tristes de nuestra existencia
y lograr un poco de alivio para cada cual (...) Poco a poco hacemos
el bien, pues como decía Martí, nuestro guía, en el Periódico del
Aire, un periódico debe ser generosidad y no azote”.32
LA
COCO ADQUIERE NUEVA PLANTA
La
revista Bohemia publicó el 23 de enero de 1949 la siguiente
nota con el título “Nuevo impulso a la COCO”, la cual dice:
“El
Periódico del Aire de la COCO, que dirige nuestro compañero Guido García
Inclán, respaldado por varios industriales cubanos ha podido adquirir
la CMHO de Santa Clara, audible en 1 310 Kc., ya unida por hilo
telefónico con la planta matriz. Es una emisora nueva Gates de 5 000
watt y una torre de construcción americana de 380 pies de altura (la
más alta instalada en Cuba).
”Con
esas mejoras y grandes adelantos, dentro de poco el Periódico del Aire,
está convertido en la tercera cadena nacional, siempre en su misión
cívica, humana, periodística y deportiva”.
LA COCO
LUEGO DEL ARTERO GOLPE MILITAR DEL 10 DE MARZO
Cuando
irrumpen en el escenario cubano las fuerzas más oscuras de la nación,
con Fulgencio Batista al frente, quedaba claro para Guido y demás
revolucionarios de la ortodoxia, que no habría otro camino que el
combate sin tregua por todos los medios posibles. El régimen que
usurpaba todos los poderes a la sombra y amparo del gobierno de
Estados Unidos no toleraría la más mínima libertad de expresión,
mientras la camarilla ambiciosa que se adueñaba del país, asesinaría a
mansalva y se enriquecería sin importarle un bledo las necesidades del
pueblo.
Sabía
Guido y los demás luchadores al servicio de los sectores humildes , que
la batalla frente a la nueva dictadura de Fulgencio Batista sería
extremadamente dura, llena de peligros, muy superior en el
enfrentamiento a los combates librados frente al desmoralizante
gobierno de Carlos Prío. Estaba claro que la tiranía superaría en
mucho la mordaza a la prensa con sus hirientes clausuras, el atropello
público, el encarcelamiento y la amenaza de muerte...
Por
suerte para el país, luego de la muerte del líder del Partido del
Pueblo Cubano (Ortodoxos), la juventud de esa organización política
tomó las riendas tácticas y estratégicas ante la incapacidad de los
sustitutos de Chibás, y al frente de la nueva generación se destacaba
desde antes del 10 de Marzo, un joven decidido, valiente y de palabra
certera y firme que encabezaría la generación del centenario de nuestro
Héroe Nacional José Martí en los combates por la liberación definitiva
de Cuba: Fidel Castro Ruz.
TESTIMONIO DE GUIDO GARCÍA INCLÁN ANTE LOS ACONTECIMIENTOS DEL 10 DE
MARZO
”Yo me
quedó allí esperando los acontecimientos, porque no se sabía por fin el
sesgo que iba a tomar aquel problema. Viene Fidel y me dice que hay que
denunciar a Batista de cualquier manera, y agrega, bueno, tú sabes que
se ha robado la República y no podemos consentirlo.
”Digo,
bueno, tú sabes que la FEU salió para Palacio a convencer a Prío de que
vaya para Matanzas, que dicen que allí se puede hacer resistencia.
”Dice
Fidel: mira Guido, de aquí no nos movemos, ni tú ni yo, y con esa
autoridad me dijo, vamos a preparar desde estos momentos qué vamos a
hacer para derrocar a Batista. Ahora yo te aseguro a ti, me dijo, que
vamos a trabajar día a día hasta derrocar a Batista, y así fue, no
quiso ir a ninguna parte, no quiso acompañar a nadie, no quiso tampoco
que le cogiera un centavo a ningún político, ni a ningún batistiano”.33
Guido
García Inclán, martiano por excelencia, que había dirigido la campaña
por una tumba digna para José Martí se propuso a cooperar en un
movimiento que con la venta de estatuillas del Apóstol, recaudaba
fondos para la causa revolucionaria.
Las
estatuillas las hacía Fidel un escultor gran amigo de Guido que desde
la COCO, este promovió y vendió muchas de ellas, una parte de las cuales
fueron adquiridas por los estudiantes a través de la FEU.
Como
consecuencia, la policía batistiana asaltó el estudio del citado
escultor y destruyó gran parte de estas obras, lo que resalta el
carácter bandálico de los esbirros asaltantes, quienes no respetaron
siquiera la figura de José Martí.
El día
13 de marzo de 1953 fueron clausurados por cinco días los espacios
informativos de el Periódico del Aire, de la COCO, ocasión en la que se
argumentaba que las emisiones de este diario correspondiente a los
últimos días, su director, a través de editoriales y noticias, se había
pronunciado en forma irrespetuosa y perturbadora sobre las
instituciones nacionales.
De
inmediato, Guido manifestó su inconformidad ante esta nueva injusticia,
haciéndola pública mediante un artículo aparecido en la revista
Bohemia, donde fijaba su posición ante las circunstancias que vivía
el país ,en el cual expresaba lo siguiente :
(...)
“Yo no necesito jurar que jamás he tenido palabras hirientes para nadie
del régimen, sé escribir y se hablar, sé, además, comportarme como un
hombre (...).
“Si
nosotros queremos la vida, señor Batista, es porque queremos a Cuba,
pero si Cuba, como la concibió Martí— no puede subsistir por el
egoísmo, la ambición o el indecoro de sus hijos...no nos importa la vida
(...).
”(...)
Sabe de sobra cómo pensamos, como hemos pensado, cómo actuamos y cómo
actuaremos siempre. Estamos —definitivamente— en el campo contrario
(...)
”(...)Nuestro sentimiento, nuestro pensamiento y nuestro patriotismo no
lo puede quemar el fuego del miedo; sólo lo podría tronchar el plomo
del odio.
”Consta:
no queremos sangre para Cuba (...) pero para llegar a esa tan deseada
normalidad, creemos que no se pueden estar dando esos traspiés de
enajenados de poder. La República —no lo olviden los encaramados— no
puede ser patrimonio de unos cuantos ni finca particular de un grupo de
privilegiados.
”(...)
lo nuestro no vale la pena (aquí Guido se refiere a la COCO). Además,
le sabríamos entregar con arrogancia —a manos llenas—, si con ello
lográramos el bien permanente de la patria. Ni ambicionamos nada, ni nos
duelen prendas. Si el amo puede decir lo mismo que alce su voz.34
La
incesante prédica de Fidel, quien ya encabezaba a la generación del
centenario en la lucha decidida contra la tiranía batistiana, prendió
para siempre en Guido, convencido de que la acción armada era el único
camino para liberar a Cuba. Aquella inmediata identificación del
director de la COCO con el líder de la Revolución, radicalizó el
pensamiento político del destacado periodista, quien en lo adelante
trabajó como un combatiente más a favor de la causa liberadora.
Los
micrófonos de la COCO fueron puestos al servicio de las nuevas ideas,
por lo que fueron clausurados incesantemente por decir la verdad. Sin
embargo, Guido pudo resistir por más de dos años los embates de la
tiranía contra su emisora, pero la situación económica se hacia
insostenible y se vio precisado a abandonar temporalmente los queridos
instrumentos de la planta que día a día daba al pueblo una información
veraz e insobornable.
A
principios de 1954, la COCO fue adquirida por Juan Amador Rodríguez;
no obstante Guido continuó colaborando en la emisora como periodista.
Al hacer
pública su retirada de el Periódico del Aire,Guido expresó lo
siguiente:
“Dijimos
en nuestra última página editorial de el Periódico del Aire, que no era
nuestra intención marcharnos al reposo (...), continuaremos luchando
desde cualquier tribuna y desde todas las tribunas, con nuestra pluma
fuera de vaina, como la pedía Máximo Gómez”.35
Y así
resultó, Guido García Inclán, una vida dedicada al periodismo no se
cobijó bajo los laureles cosechados en largos años de labor perenne en
beneficio del pueblo cubano y comenzó a trabajar en agosto de 1954 en
un nuevo proyecto internacional: el periódico televisivo Patria, que se
trasmitía por el canal 11.
La
separación temporal de Guido García Inclán de su querido Periódico del
Aire, sirvió para profundizar en su pensamiento revolucionario y
coordinar acciones junto a Fidel y los moncadistas.Guido cooperó con
la campaña pro-amnistía a favor de los encarcelados por los sucesos de
los cuarteles Moncada y Carlos Manuel de Céspedes, y por tal motivo
visitó en varias ocasiones la cárcel de Isla de Pinos, con el objetivo
de proporcionar libros a los revolucionarios presos.
Cuando
en 1955 Batista, presionado por la voluntad popular, se vio obligado a
declarar la amnistía de los moncadistas, Guido estuvo entre los que
recibieron a los revolucionarios liberados, y luego gestó junto a Fidel
el Movimiento 26 de Julio. Sobre esa etapa el director del Periódico del
Aire diría:
“Muchos
fueron los intercambios de impresiones que sostuvimos, no sólo a manera
de consultas recíprocas. Muchos de ideas contrarias a las de Fidel, en
más de una ocasión me preguntaron por qué lo seguía. A todos ellos le
respondía siempre: porque Fidel sabe lo que dice y hace. Por eso
triunfó, por su ideal martiano, su espíritu de justicia, su abnegación
y decisión ante la lucha. Todo su pensamiento, el programa de acción del
movimiento revolucionario 26 de Julio se cumplió”.36
Guido
García Inclán participaba en casi todas las actividades públicas que
organizaba el Movimiento 26 de Julio en esa época. A muchos
combatientes les procuró su salida de Cuba y también en incontables
ocasiones se personó en las estaciones de policía para denunciar los
atropellos que cometía el régimen existente.
En
noviembre de 1955 Guido estuvo en un mitin que efectuó la emigración
cubana en el teatro Flager de Miami, el mayor de los efectuados durante
todo el proceso revolucionario cubano en el exilio, el cual tenía como
objetivo principal recaudar fondos para la Revolución. Allí, junto a
Fidel y Juan Manuel Márquez, Guido participó bajo la cobertura de
reportero de la revista Bohemia. Y expresó:
“...No
se trata de salir sencillamente del régimen actual, sino (...)de llevar
al poder la virtud, de que triunfen las fuerzas morales...No venimos en
prédica guerrera, quisiéramos que la solución fuera sin derramamiento
de una sola gota de sangre. Mi Arriba Corazones es revolucionario; es el
Arriba Corazones para que el poder no vuelva a ocuparlo los
ladrones, para que en Cuba no haya esclavos ni mendigos...Las fuerzas
morales son las que necesita nuestra Patria”.37
LA
EMISORA ATRAVIESA POR UNA COMPLEJA ETAPA
En 1954
la emisora pasó a manos del periodista Juan Amador Rodríguez (abandonó
el país luego del triunfo e la Revolución) quien había trabajado la
crónica policial desde los micrófonos de Radio Progreso. Este contó con
el apoyo del empresario Tomás Felipe Camacho, propietario del
orquidiario de Soroa, y del dueño de la mueblería La Predilecta,
quienes le entregaron parte del dinero, con el que adquirió la COCO,
aunque no le pagó a Guido todo el importe del valor de la emisora,
lo que hizo mediante una transacción, mensualmente. Una vez la planta
en manos de un individuo hábil en turbulentos negocios y
oportunismos políticos, la emisora tomó un perfil noticioso distinto a
su tradicional estilo de programación, fue una etapa en la que
predominaron los anuncios comerciales y varios de los espacios
adquirieron el diseño de su director, con matices sensacionalistas y
de cortes politiqueros.
Juan
Amador Rodríguez, nuevo director y propietario de la COCO, aspiró en las
fraudulentas elecciones efectuadas por Batista en 1954 a un acta de
representante por el Partido Auténtico, cuando ya la generación del
centenario había empapado con su sangre generosa los tenebrosos muros
del Moncada, y cuando todavía los sobrevivientes de esa heroica epopeya
consumían injustas condenas en las cárceles del tirano. En 1958 volvió
por ambiciones politiqueras y fue “elegido” Senador, funciones que
nunca pudo ejercer debido al triunfo del 1ro de enero de 1959.
Este
individuo adquirió la COCO el 12 de abril de 1954, como consecuencia
de las difíciles condiciones económicas por la que atravesaba la
planta con la ausencia de patrocinio por parte de firmas productoras
que no se atrevían a arriesgar sus anuncios en una emisora que con
frecuencia sufría censuras, cierres y persecusión, circunstancias en
las que su propietario, Guido García Inclán, se vio obligado a
venderla.
Juan
Amador Rodríguez trasladó la emisora COCO de Virtudes y Manrique,
donde se encontraba, a la calle Reina. Allí estuvo la planta algunos
meses, cuando fue a dar a los terrenos de la cervecería La Polar,
lugar donde se construyó un edificio, se adquirieron los más modernos
equipos de la época (Gates), lo que convirtió a la planta en una de
las más modernas del país.
Indudablemente, el Señor Rodríguez se valió de algunos “buenos
amigos”, para que lo ayudaran a prosperar en su negocio, que pudieron
multiplicar, como dijera más tarde, sus ingresos y al mismo tiempo
elevar en varias veces el valor de la referida planta.
TESTIMONIO DEL COMPAÑERO FAUSTINO PADRÓN
“Me
incorporé a la COCO en 1956 como ayudante técnico y después como
operador de audio. Cuando aquello la emisora se encontraba en avenida
de Rancho Boyeros y Carretera de La Polar. Su propietario era Juan
Amador Rodríguez.
”Por
aquella época se siguió escuchando el Periódico del Aire y la
identificación de la planta era COCO-CMCK el Periódico del Aire. Guido
tenía por esa fecha un espacio en la COCO, de 6 a 7 de la noche. En el
mismo él hacia noticias y el editorial, con el mismo corte martiano,
la anticorrupción y el espacio de facilitación social, se transmitía
todos los días (de lunes a viernes). El locutor leía las noticias y
Guido cerraba con el espacio editorial.
”Recuerdo que el noticiero estelar salía a la una de la tarde,
dirigido por José Pardo Llada (abandonó el país en 1961), quien hacia
los editoriales. La emisora se mantenía en el aire desde las 6:58 de la
mañana hasta las 12 de la noche, domingo a domingo y el tema de apertura
y cierre de la planta era la canción El Mambí de Luis Casas Romero.
”Durante
la época de Juan Amador Rodríguez los espacios que más sobresalieron
fueron: la Entrevista Policíaca, que se trasmitía a las 12:20 del día
(de diez minutos ), lo hacía el propio Juan Amador Rodríguez, el
Noticiero a la una de la tarde, con el editorial de Pardo Llada y el
espacio de Guido a las seis de la tarde. Había también un espacio
deportivo de 7:00 a 7:30 de la noche, que lo dirigían Miguel Ángel
Blanco y Faustino Miranda, además de las transmisiones de los
campeonatos profesionales de béisbol.
”Recuerdo también que por esa época había un espacio dirigido a la
colonia china, en el horario de 7:30 a 8:00 de la noche, que contenía un
noticiero chino y su director era Ángel Untan, periodista chino.
”Estando
la emisora COCO en la avenida de Rancho Boyeros se construyó un
edificio para estudios y oficinas. Se trajeron nuevos transmisores
importados de los Estados Unidos, entonces las grabadoras y consolas
eran de marca Gates. La planta tenía una potencia de 5 kilos, igual a la
anterior y transmitía en onda corta y onda larga, hasta 1960 que dejó de
ser de onda corta. En 1962 Guido la trasladó para la calle Diez, en El
Vedado, pero los transmisores se quedaron allí, el equipo nuevo lo
enviaron a Cienfuegos y comenzaron a transmitir con otro equipo
instalado en la loma de La Cruz.”38
LUEGO
DEL PRIMERO DE ENERO DE 1959 LA COCO RETOMA SU TRADICIONAL ESTILO
PATRIÓTICO-REVOLUCIONARIO
Durante
el primer año de Revolución, Juan Amador Rodríguez continuó al frente
de la COCO. Todavía la fuerza incontenible de la Revolución no había
podido llegar con su justiciero empuje para barrer de cuajo con este
quelonio agazapado entonces y disfrazado de opositor del tirano, en
cuyas elecciones sin apenas votantes le había obsequiado un acta de
Senador. Pero tuvo todavía la osadía para insultar y ofender al
compañero Guido García Inclán, a través de un extenso artículo
periodístico publicado en Prensa Libre, acusando al insobornable
periodista de “falso protector de los desvalidos” y de haber dejado a
la COCO en ruinas.
Por
supuesto, la nota emitida un día antes en el periódico Revolución,
no dejaba dudas, y explica en forma concisa y clara los argumentos
por los cuales quedaba confiscada la planta COCO. La nota publicada
en Prensa Libre el 5 de mayo de 1960, decía lo siguiente:
“La
confiscación de las radioemisoras COCO y CMCK de La Habana, de la
Compañía Insular de Radio S.A. En Las Villas, estación CMH0, fue
firmada por el ministro de Hacienda, Capitán de Corbeta Rolando Díaz
Aztaraín, a través del Departamento de Recuperación de Bienes
Malversados.
“
Respecto a las radioemisoras COCO y CMCK y a la Compañía Insular de
Radio S.A., la Resolución confiscatoria al ex representante a la Cámara,
Juan Amador Rodríguez, significándose que se ha acreditado igualmente
del expediente incoado que dicho legislador le adeuda al periodista
Guido García Inclán, como parte del precio aplazado de las empresas de
su propiedad que aquel le hizo a este, la suma de $ 56 300.00.
”Los
derechos y acciones confiscadas tienen un valor de $ 59 713.66”.39
Por su
parte, el compañero Guido García Inclán respondía a la injuriosa carta
de Juan Amador Rodríguez, con una nota escueta pero clara y precisa.
TESTIMONIO DEL PERIODISTA SERGIO AMARANTE RODRÍGUEZ
“Cuando
empezamos en la COCO, el Periódico del Aire, en el año 1962, entonces
estaba la emisora ubicada en la calle 10, entre 17 y 19. Mis primeras
vivencias de este legendario órgano de la noticia —cuando entonces
éramos un grupo de corresponsales jóvenes— fue visitar la planta con el
objetivo de pasar un curso para comentaristas y narradores deportivos.
”Se
necesitaba formar nuevos valores para la narración, el comentario y la
crónica deportiva, y mi primer impacto fue precisamente conocer a aquel
hombre que hizo revolución con Fidel, el compañero Guido García Inclán,
quien puso los micrófonos de la COCO al servicio de la obra de la
Revolución.
”Siempre
le dije maestro a Guido y hubo una relación muy estrecha entre nosotros,
porque él no me llamaba por ni nombre, sino me decía a mí también,
maestro. Para mí él siempre fue mi héroe en el periodismo, porque me
gustaba la forma en que decía sus comentarios editoriales, y tanto
influyó en mi persona, que por ejemplo, yo tenía a las siete de la
mañana un comentario editorial en las prácticas docentes, además de otro
en la COCO, relacionado con el deporte y mucho tuvo que ver ese
sentimiento raigal y de identidad que me unía a él, que tuve la
iniciativa de hacerlo sobre la base de su estilo, y tuve siempre por
su parte todas las facilidades para que yo lo hiciera.
”Entre
aquellos jóvenes estaba Héctor Rodríguez, junto a Antolín León, Miguel
Iglesias y Otto López, estos dos últimos , ya fallecidos. También Diego
Méndez, Roberto Pacheco, Piti Rivera, Julio César Vallant y Raúl Arce,
entre otros.
”Nuestra
real escuela fue la COCO, en ella aprendimos el trabajo de redacción y
también nos enseñaron la ética del periodista. En este aspecto, su
director, Guido, era la expresión más alta. Entre las cosas que observé
estuvo la exigencia en el vestir de los periodistas; el orden y la
limpieza de la planta. Allí nada sobraba, había orden y limpieza. De
aquellos tiempos puedo hablar de María Luisa Mac Beath ( la Tía wiche)
que hacía programas infantiles al mediodía , en días alternos y el tío
Lara, que hacía narraciones infantiles a las 5:30 de la tarde; Marcelo
García, que era un comentarista deportivo, Consuelo Doris, operadora,
Pedro Yera, quien era Jefe de Transmisión y Secretario General del
Sindicato, además de Gerardo Contreras y otros compañeros.”
”Todas
las mañanas llegábamos muy temprano y nos poníamos a observar en la
vidriera ubicada en el salón de entrada, aquellas cartas que
ejemplificaban esa relación epistolar entre Guido y Fidel.
”No
había un editorial de Guido en el que no tuviera presente un pensamiento
de Martí. Eso me marcó mucho y por eso en mis trabajos periodísticos
siempre busco una cita martiana. Eso lo aprendí de la COCO, porque esa
consigna de que en la COCO siempre es 26 y 28, en Julio como en Enero,
tiene un honda raíz martiana.
”La COCO
siempre fue una emisora escuela, un órgano para la práctica docente en
el periodismo de la capital y del país, y fue siempre escuela para la
juventud, y lo más importante, el papel que ha desempeñado esta emisora
como voz de la Revolución. No fue algo casual, ella siempre fue una
emisora informativa, onda deportiva-informativa de la radiodifusión,
pero dentro de su proyecto, incluye la música tradicional cubana, y ha
sido la emisora que más noticieros siempre tuvo y por ello, siempre
requirió de un fuerte equipo de corresponsales y colaboradores. Hay
que decir que la parte teórica la cursábamos en el Instituto Superior
de Educación Física.
”Recuerdo que allí aprendimos a dominar varias disciplinas deportivas,
lo cual nos valió para un espacio dominical que se llamó Radio Debate
Deportivo, que salía a las 9 de la mañana. Entonces escogíamos
diferentes lugares como el estadio del Cerro o cualquier otra esquina y
me buscaba un par de polemistas, de esos que les gusta debatir sobre el
deporte y los invitaba al programa, el cual mantenía una gran audiencia,
porque lo promocionábamos durante toda la semana. En aquellos momentos
había un panel que lo presidía Rubén Rodríguez o Eddy Martin y había una
figura como Bobby Salamanca, quien era entonces, además cronista
deportivo del periódico Granma, y narraba el béisbol por la COCO.
”En una
ocasión, recuerdo que fue en la serie de béisbol de 1968, tomamos por
iniciativa el programa radio-debate deportivo para celebrar el Día de
las Madres, con la participación de las progenitoras de los principales
deportistas de los equipos que estaban en el campeonato. El orador
principal fue Guido García Inclán, y se trasmitió por la COCO.
”Por
aquella época, también tenía un espacio que se llamaba El Teléfono y sus
tres Cosas, que eran: música, deporte y juventud. Era un programa de
participación, se trasmitía a las ocho de la noche y se recibían cientos
de solicitudes durante una hora.
”Teníamos otro programa que se llamaba El Deporte en el Mundo, que se
trasmitía los miércoles a las dos de la tarde, el cual contaba con
actuaciones de dramaturgia, con la participación de artistas como Gina
Cabrera o Sonia Bocian, del ISA. Había también un noticiero deportivo
que salía al aire a las 6:00 de la tarde y se mantenía hasta las 7:00 y
media, que incluía el editorial deportivo, que me correspondía hacerlo.
Había otro espacio deportivo a las 12:00 del día y otro a las 7:00 de
la noche. A continuación ofrecía Guido su comentario editorial.
”El
movimiento de corresponsales siempre tuvo cabida en la COCO, recordemos
que esta emisora ha sido siempre la de los trabajadores en la capital,
con mucho arraigo, no solo en el deporte sino en la información en
general desde los municipios y los barrios a través de los
corresponsales voluntarios.”
”El gran
proceso empieza a tomar fuerza en la COCO allá por el año 1967,
teniendo su etapa superior durante los años noventa, y la UPEC por su
parte lideró esta batalla en la que la esta emisora capitalina ha sido
siempre escuela de este contingente de colaboraciones de la información
radial.
”En 1978
se entrega el proyecto de corresponsalías en la capital por parte de
Jorge Rodríguez y Víctor García Santos y surgen las primeras cuatro
territoriales: la del Este, que incluía a Guanabacoa, San Miguel del
Padrón, Regla y Cotorro; la del Sur, que correspondía a Boyeros y
Arroyo; la del Centro-norte, con Marianao, Playa, Habana vieja y Centro
Habana. No es hasta el año 1987 en el que se vuelve a retomar con
fuerza esta experiencia, que viene desde Cárdenas y Matanzas.
”En la
capital correspondió a San Miguel del Padrón, la primera corresponsalía
con estructura municipal y a partir de ahí se extendió a los 15
municipios de la ciudad. Allí surge la primera cabina construida
herméticamente contra el ruido y las vibraciones; después se
construyeron en iguales condiciones la de Guanabacoa, Centro Habana y
Marianao, en ese orden. Puede decirse que el periodismo comunitario ha
tenido como su principal mentor en la capital a la COCO, y en ese
sentido se han desarrollado talleres, seminarios y encuentros de
intercambios de experiencias.40
EDITORIAL DE GUIDO GARCÍA INCLAN DEDICADA A LA COMPAÑERA CELIA SÁNCHEZ
MANDULEY
”Tenemos que hablar de Celia. .Es como una imposición de la vida. Es
como un deber nuestro. Tenemos que hablar de Celia mujer excepcional. De
ella se ha dicho bastante en estos días, y hubo que esperar por la
muerte. Celia, queridos amigos, se oponía, escudaba a los fotógrafos, no
quería verse en televisión, ni salir por la radio. Era ella. Era Celia
Sánchez y nada más. Era amor. Vivía para los demás; sencilla, humilde
siempre. Hablaba tenue. De nadie hablaba, y resolvía, y si supieran
queridos oyentes, cómo conocimos a Celia. Por un perro. ¡Quien lo
diría!, pero la vida es así. Celia provenía de una familia maravillosa.
Quisimos a Celia por revolucionaria, a Celia por su bondad; a Celia
porque quería a Martí por sobre todo; porque adoraba y respetaba a
nuestro Fidel, y sucedió con ella lo que nos aconteció con el Che;
estábamos en distintos lugares, en distintas provincias, a distintas
alturas, ellos por la loma combatiendo, nosotros en el llano, en La
Habana, peleando, y Celia supo de nosotros como el Che, por el propio
Fidel, así son las guerras, así son las familias que no se conocen y se
forman y se quieren.
”El
padre de Celia, el doctor Sánchez, decíamos que era una maravilla de
hombre. Allá en Santiago le llamaban el médico del Che, a todos trataba
de curar, a nadie cobraba. Él nos conocía por nuestros escritos; por
Bohemia, por la radio y nos escribía como un hermano.
”En
aquella ocasión nos habían regalado un precioso cachorro, hijo de
campeones y lo rifamos para obtener fondos para la Liga contra el
Cáncer.
”El
primer telegrama que recibimos en respuesta a nuestra idea, publicada
en todas partes, fue de Santiago de Cuba, del doctor Sánchez, y tuvimos
la alegría de que fuera el doctor Sánchez el agraciado con el pequeño
perrito. Ya nuestro amigo no se sentía muy bien, nos dijo que
volviéramos a rifar el perro para engrosar más fondos. Después de
aquello, nos cruzamos algunas cartas. Siempre nos hablaba de Celia, de
Fidel, de la revolución necesaria que se estaba haciendo; del valor que
todos necesitamos, de las mujeres (…), de los hombres, en ellas nos
animaba a vivir. Poco después falleció.
”Celia
no ha muerto, a Celia la está mirando Martí desde el Turquino, donde
colocó su busto. A Celia Sánchez hay que imitarla, hay que tenerla
presente siempre como un símbolo. Pudo haber sido una leyenda en su
afán de servir pero es toda una realidad que nos adentró a la
Revolución.
”Celia
amaba, quería e idolatraba a nuestra Revolución como algo de ella,
porque era de ella, fue y es fuente de esa Revolución…
”No has
muerto hermana mayor. Estás junto a tu padre para seguir curando a los
enfermos, para ayudar a los desposeídos para atender a los que estamos
aquí.
”El
sábado la despedimos con una frase martiana, que era de ella también y
de su padre: Arriba Corazones”. 41
Lunes 14
de enero de 1980.
SEMBLANZA DE GUIDO GARCÍA INCLÁN SOBRE EL CAPITÁN DE LA CLASE OBRERA,
LÁZARO PEÑA, EMITIDO EN DIFERENTES EDITORIALES
Guido
recordó siempre a Lázaro Peña en sus editoriales, con motivo de los
aniversarios por la muerte del destacado dirigente sindical. Resaltada
al mismo tiempo las virtudes del líder obrero, con el que intercambió
criterios y experiencias y le ofreció los micrófonos de la COCO, cuando
la emisora de los trabajadores, la Mil Diez fue brutalmente clausurada
en los meses finales del corrompido gobierno de Ramón Grau San Martín De
Lázaro diría:
”El 11
de marzo es una fecha de luto para nuestra nación, fue el 11 de marzo
cuando se nos escapó de la vida nuestro inolvidable Lázaro Peña. Lázaro
siempre fue nuestro amigo, nos reuníamos a menudo, cambiábamos
impresiones, algunas veces junto a Juan Marinello que tampoco olvidamos.
Aquellas luchas de Lázaro eran nuestras, siempre eran a favor del
pueblo, a favor de los trabajadores, aquello era su obsesión. Soñaba con
tener el poder algún día y lo logramos conjuntamente... Desde aquellos
tiempos de Machado siempre junto a los estudiantes, hasta estos grandes
días del socialismo.
”Nosotros fuimos amigos de Lázaro Peña, para nosotros jamás había miedo
a la palabra, ni a ninguna situación, para nosotros la Patria es lo
fundamental.
”Lázaro
Peña González fue un gran dirigente sindical y después, cuando fue
necesario para el cargo, tuvimos a un combatiente de la Revolución
socialista. Él fue ese ejemplo de hombre surgido de las entrañas
humildes del proletariado, defensor de los oprimidos para lograr
convertirse en el guía más querido y aclamado de los trabajadores de
este país.
”En esa
inquebrantable línea lo vimos y lo tuvimos junto a nosotros por más de
40 años. Muchas veces nos acercábamos a Lázaro para saber de sus
experiencias, para escuchar sus consejos, y muchas veces era él quien
llegaba hasta nosotros para cambiar impresiones sobre la gran lucha que
se avecinaba en nuestra Patria”.
LA
COCO, FORMIDABLE ESCUELA DE NARRADORES Y COMENTARISTAS
DEPORTIVOS
A partir
de finales de la década del 60, la emisora COCO, comenzó a preparar a
diferentes grupos de narradores y comentaristas, que primero en esta
emisora y posteriormente en emisoras nacionales y en los canales de
televisión han ido desarrollando su trabajo. De una parte de ellos son
los siguientes testimonios:
EL
DEPORTE POR LA COCO
Guido
garcía Inclán amplió la programación deportiva por la emisora COCO, como
aficionado a algunas disciplinas deportivas, ello lo motivó para
incrementar las informaciones de ese tipo. Al respecto dijo:
“...debo
añadir que siempre fui un amante del baloncesto, el cual practiqué, y
del béisbol en el periodo estudiantil. Posteriormente la profesión me
impidió dedicarme a estas actividades como eran mis deseos. Además,
conocido es por todos que en Cuba prevalecía el profesionalismo, el
mercantilismo deportivo, por encima del deporte limpio, del deporte
amateur. Ese era el negocio de la época. Ningún gobernante se ocupó de
prestarle la debida atención al desarrollo deportivo en nuestro país”.
“Cómo
iban a preocuparse por mejorar y prolongar la salud y el bienestar del
pueblo a través de los ejercicios que comprende esta san actividad que
hoy si es un derecho de todos, cuando yacían hacinadas miles de familias
en barrios insalubres, padres sin empleo, niños, mujeres y hombres
hambrientos, descalzos, sin atención médica y educación”.
“La onda
deportiva surgió en el año 1948.Las estaciones de aquel entonces solo
brindaban al público un noticiero frío de deportes y entonces se decidió
ofrecer algo de mayor interés”.
”Le
llamamos El Periódico del Aire y tenía como lema ‘Una institución de
periodistas al servicio del pueblo cubano’. En ella imperaba siempre el
deporte, aunque para que existiera la emisora debían estar unidas las
tres famosas ‘P’. Pelota, policía y política”.
“Cada
vez que podíamos se leían proclamas siendo una planta abierta para
defender los derechos del pueblo. La onda deportiva de la COCO se
oficializó después del triunfo de la Revolución en el año 1968”.
Héctor
Rodríguez Almaral
”Comencé en la COCO en el año 1967 y estuve un año en esa emisora,
la cual significó para mí muchísimo. Pienso que ha sido una emisora
fundamental en la formación de narradores-comentaristas pues por ella
han pasado muchos compañeros que después se trasladaron a emisoras
nacionales de la radio y a canales de televisión, así como en la
prensa plana.
”Recuerdo a Guido siempre impecablemente vestido y peinado, orientando
y dando su ejemplo en los momentos precisos. Guido fue sin duda un
maestro de la palabra y la acción”.42
Diego Méndez Calero
(Narrador-comentarista de Radio Rebelde)
“La
COCO ha sido sin duda la gran escuela de los narradores deportivos, y
no solo de la capital del país, sino también a nivel nacional. En este
contexto yo no soy una excepción, para mí fue punto de partida. No fue
donde hice mi primer noticiero, pero donde comencé un trabajo
sistemático y cotidiano fue en la COCO, y allí empezamos la mayoría de
los que hoy somos los más experimentados narradores del país.
”La COCO
nos ayudó a entrar en esta profesión, a ir conociéndola, a dar los
primeros pasos y narrar varios deportes, y hacer programas, y por ello
tiene un peso inmenso en nuestras vidas profesionales. La recordamos con
mucho cariño, como recordamos a Guido García Inclán. Aquel primer curso
de narradores deportivos en los años 60, fue organizado por el INDER y
el ICRT, pero el punto donde se trabajó a diario, con más énfasis fue en
la COCO, y allí estuvimos varios años trabajando, y Guido como mentor,
tuvo una mentalidad positiva, porque siempre tuvo a flor de labios el
sí, y esto le daba fuerza y optimismo a los compañeros y nos ayudaba
mucho.
”La
COCO trasmitía 18 horas diarias de programación, con una reducida
cantidad de trabajadores , y todos cumplían una labor de multioficio. En
eso también fue escuela la COCO y demostró que se puede hacer un buen
trabajo de calidad con un número reducido de trabajadores. Por eso,
recalco, la COCO fue nuestra gran escuela y la vemos en esa misma
dimensión, porque en ella hemos tenido la oportunidad de dar clases y
nos hace sentirnos como parte de su colectivo, emisora a la que queremos
mucho, a todos sus trabajadores, a los de aquella época y los de ahora.
Eso es lo que yo siento y lo que pienso de lo que significa para mí la
COCO”.43
Ramón
(Piti) Rivera García (Narrador-comentarista de Radio Rebelde)
“Para
los que comenzamos aquel curso de narración deportiva hace 37 años, con
la incorporación de un grupo de 27 miembros al corte de caña en la
provincia de Camagüey, y al regreso, en mayo de aquel mismo año,
comenzamos a estudiar, y desde entonces comenzamos a laborar en la COCO
en transmisiones de pelota todos los domingos, fue una verdadera
escuela de trabajo.
”En lo
particular recuerdo que después de haber trabajado 3 ó 4 años en
diferentes provincias, en las narraciones de pelota, los integrantes
pasaron a formar parte en la programación de la Radio Nacional, pero
Miguel Ángel Iglesias y yo, optamos por quedarnos un tiempo más en la
COCO, porque realmente esta emisora brindaba una oportunidad
extraordinaria de desarrollo, allí hacían cuatro noticieros diarios,
participaba en narraciones de pelota o baloncesto y otras disciplinas y
entramos en la programación deportiva nacional con una base importante.
Recuerdo con mucho cariño la COCO. Lamento muchísimo que el último lugar
donde estuvo la emisora, estando Guido al frente de ella, en la calle
Diez , entre 17 y 19, no forme parte de un museo, porque fue una emisora
significativa para las transmisiones noticiosas, recordemos los
editoriales de Guido García Inclán, y que incluso mucha gente en el sur
de los Estados Unidos la oían, después del triunfo de la Revolución.
”Tengo
que agradecerle mucho a Guido que fue quien permitió que el curso
comenzara en la COCO y él confió en los compañeros que entraron al
mismo y nos dio todo el apoyo que en aquel momento era muy importante.
La COCO sigue siendo la onda deportiva, no solo de la capital, sino que
sigue siendo la onda deportiva informativa del país porque ha servido
también para trasladar a nuestros oyentes los detalles más importantes
de cada evento.
”La
emisora COCO constituyó para mí lo fundamental dentro de la narración
deportiva —expresó también Dagoberto Miguel Toledo, actualmente en
Radio Rebelde— En la COCO pude aprender la mayoría de los secretos de
la especialidad y agradezco muchísimo a todos los que han tenido que ver
con mi formación como narrador-comentarista. Fue en la COCO donde di
los primeros pasos como corresponsal deportivo, cuando nos abrió las
puertas a muchos de nosotros en esa tarea y posteriormente en un curso
de narradores en la década del 70. Después la COCO me permitió lograr
importantes objetivos en la profesión, que me hicieron llegar a Radio
Rebelde con toda una base que obtuve luego de 15 años de permanencia
en esa planta.
”Recuerdo que en 1974 cuando me inicié en la COCO como narrador
deportivo , aun sin graduarme, en una ocasión esa emisora trasmitía con
dos narradores profesionales en el Cristóbal Labra de la Isla de la
Juventud y yo me había quedado en el estadio Latinoamericano
recepcionando lo que ocurría en el Labra, y en el doble juego de los
equipos Agricultores y Serranos en el Latino, pero en el Labra comenzó
a llover y en el estadio Cándido González de Camagüey se encontraba
Boby Salamanca, que estaba narrando por Radio Rebelde, pero en ese
lugar también comenzó a llover, y este anunció que de no poder
realizarse el juego en el Cándido González pasarían las transmisiones al
estadio Latinoamericano. Recuerdo que me encontraba allí con Julio
César Vallant y me acerco a él y le digo que de pasarse la transmisión
al Latinoamericano íbamos a tener que narrar el citado juego, y así
fue, con la complicación de que el primer partido de ese doble juego se
extendió a 14 entradas.
”También recuerdo que la programación deportiva de la COCO en aquellos
tiempos era muy abierta, y Guido interrumpía la programación y daba paso
al deporte de cualquier evento provincial o nacional. Las noticias
fundamentalmente estaban dentro de los boletines que se realizaban
también al final de cada hora, al mediodía había un noticiero y por las
tardes otro.
”La COCO
ha sido en todos estos años una verdadera escuela de narradores
deportivos, quienes después se han trasladado hacia las emisoras
nacionales y a la televisión y ha continuado la línea de promover en
cada etapa a nuevos narradores, y en esto ha tenido que ver también su
director en los últimos años, Wilfredo Gil Figueredo, quien ha sido un
continuador de ese trabajo que realizara Guido García Inclán, abriéndole
las puertas a todos los que tienen inquietudes profesionales en las
distintas especialidades deportivas en la radio, como una necesidad
que tiene la capital del país”.44
Rolando Crespo Rodríguez (Narrador–Comentarista)
”En la
COCO hice mis primeras colaboraciones en el año 1968, pero no fue hasta
1971 cuando comencé a narrar de forma permanente en la emisora, en
todos los deportes que se trasmitían. Recibí un gran tratamiento y
apoyo a mi trabajo en todo momento por parte de Guido García Inclán.
Por aquella época atendía tres programas deportivos diariamente, de 15
minutos cada uno, hasta 1973, que pasé a una programación deportiva
que se organizó por el ICRT que abarcaba la radio y la televisión.
”De la
COCO, recuerdo que había allí un buen colectivo de trabajadores,
bastante reducido. Los noticieros salían con dos periodistas y eran de
media hora, siempre con el esperado editorial de Guido García Inclán.
Guido conversaba mucho con los trabajadores, llegaba siempre temprano e
impartía las instrucciones al personal. Era muy martiano”.
Reinier
González Pérez
En la
nueva generación de narradores-comentaristas de la COCO, se encuentra
Renier González Pérez, joven dinámico, quien participara recientemente
de forma destacada en la Esquina Especializada que tan importante papel
desempeñara durante los XVI pasados Juegos Deportivos Panamericanos.
De su emisora refiere:
”La COCO
ha significado todo para mí. Fue donde me inicié, donde se me dio la
oportunidad de comenzar a trabajar, donde aún laboro y en ella me siento
bien y siempre en ella voy a ocupar un papel importante de mi carrera,
que forma parte de mi vida.
“Esta
emisora ha jugado siempre un papel importante en la mayoría de los
narradores de las emisoras nacionales, que se han formado en ella como
escuela de estos profesionales. Lamentablemente no se pueden mantener
allí por el hecho de ser esta una emisora provincial que abarca solo un
sector del territorio, pero creo que ocupa un lugar especial en el
corazón de todos los que nos iniciamos en ella y gracias a la misma
tuvimos la oportunidad de desarrollar la carrera que siempre soñamos”.45
Luis
Izquierdo Valdés (Narrador-comentarista de Radio Rebelde)
¿“Qué ha
significado la COCO para mí y para todos los que pasamos por ella”?
“Esta
emisora ha significado una escuela para todos los
narradores-comentaristas deportivos del país. Yo formé parte de aquel
curso de narradores-comentaristas deportivos, que se realizó en el año
1985, organizado por el compañero Wilfredo Gil Figueredo, quien se
encontraba en aquel momento al frente del informativo de esta emisora,
en el cual muchos de los que hoy laboran en los medios nacionales se
formaron, y muchos de los logros obtenidos por nosotros precisamente se
debe a aquella iniciativa de la COCO, que tampoco se ha detenido.
”La COCO
no solo es una escuela desde el punto de vista profesional, sino
también integral, y tiene que ver mucho quien la formó y logró llevarla
al aire, con los principios que la guió, con la seriedad, la verdad y la
responsabilidad y respeto en que trasmitía para los oyentes. Y en la
parte operativa una de las cosas que ha caracterizado la COCO es el
criterio de sus profesionales, quienes siempre han trabajado basados en
las investigaciones, en la verdad y en la objetividad. Yo no puedo ver
el desarrollo de la narración y el comentario deportivo en Cuba sin la
COCO.
“También
el nivel de calidad que se ha logrado en las transmisiones de la COCO,
en todos los eventos deportivos, en las series nacionales en los
Decimoterceros Juegos Panamericanos de 1991, sobre todo por la
diversidad de las transmisiones deportivas que genera la COCO, que no se
circunscriben a uno o dos eventos, sino que da una gran cobertura a
todos en los que estén involucrados los equipos de la capital, y a los
internacionales que se desarrollan en La Habana”.46
Jorge
Pável Otero Gutiérrez (Comentarista deportivo)
Jorge
Pável Otero Gutiérrez, un joven que ha captado a velocidad
supersónica el sabio legado de sus antecesores
narradores-comentaristas deportivos que tanta gloria han dado a la
emisora COCO, nos dice:
”Para mí
comenzar a trabajar como comentarista-deportivo en la COCO fue un gran
sueño que se hizo realidad. Hoy, después de varios años en esta
especialidad es algo de lo cual no me pudiera separar en mi vida
personal ; algo indescriptible. Para mí la COCO es una escuela de
comentaristas deportivos a los que siempre he admirado; es algo
inigualable en mi vida. No creo que haya otro logro en mi vida personal
que pueda superar esta vocación que para mi es algo de lo cual no me
puedo separar.
”Estar
trabajando con los mismos micrófonos por donde pasaran grandes figuras
de la narración deportiva y de nuestro proceso revolucionario, entre
ellos el Comandante en Jefe Fidel Castro y muchos profesionales de gran
valía, y ser yo uno de ellos, no tengo como agradecerlo, de muchas
personas que me han ayudado, que han confiado en mí y pusieron los
micrófonos de la COCO, tan valiosos y tan históricos al servicio de
una profesión, lo que significa que también haya aportado mi grano de
arena a la larga y trascendental trayectoria que ha tenido nuestra
emisora.47
Andrés Hernández Vargas (Andy Vargas)
Este
pimentoso narrador-comentarista de la COCO, muy popular por su
peculiar estilo de narrar y el empleo de las metáforas en la
descripción de los juegos de béisbol, también nos da su opinión sobre
lo que ha significado la COCO en su formación profesional.
Vargas
no duda un instante en dar su respuesta a la pregunta de qué significó
la emisora COCO para él; con la agilidad que lo caracteriza nos dice:
“La radio COCO es la universidad de los narradores deportivos cubanos.
Fue en el año 1985 cuando por iniciativa de su actual director, el
compañero Wilfredo Gil Figueredo, comencé en un curso de
narradores-comentaristas deportivos en esa emisora, y empezamos a
estudiar con varios profesores que han marcado pauta en la locución de
nuestro país.
”Después
me desvinculé de la COCO y pasé a trabajar a la televisión como
animador y productor, y en 1990, regresé a esta emisora, y fue mi
prueba de fuego como narrador-comentarista deportivo, debuté en los
Juegos Panamericanos del 91, con sede en La Habana; narré ciclismo,
natación y di cobertura al tenis de campo y al atletismo.
”Ya
después, en 1996, me evalué y dos años más tarde obtuve el primer nivel
como narrador-comentarista deportivo. Dondequiera que me pare, vivo
orgulloso de haberme iniciado en esta emisora; que respeto, porque
repito, es la universidad de los narradores deportivos cubanos. Sobran
los dedos de una mano para sacar una cuenta fácil, de cuántos
narradores-comentaristas de la radio nacional y la televisión se han
iniciado por la COCO.
”En
cuanto al deporte, la COCO es la emisora que marca la pauta en la
radiodifusión de nuestro país.
“En lo
personal, también la COCO me ha aportado muchísimo en cuanto a la
disciplina, en el hábito del cumplimiento del horario, y en el trabajo
que también forma parte de mi formación, y ojalá que los jóvenes que en
los últimos años se han ido incorporando a nuestra emisora, la sepan
defender siempre, porque esas cuatro letras, que identifican a la
emisora COCO, dicen machismo en nuestro país y esas cuatro letras hay
que honrarlas”.48
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